Los museos colonialistas del ministro Urtasun
En respuesta a las declaraciones del ministro de Cultura sobre la «descolonización de los museos nacionales»
En declaraciones en el Congreso de los Diputados, el ministro de Sumar, Ernesto Urtasun, ha anunciado que su ministerio llevará a cabo una revisión de las colecciones de los museos nacionales para superar un marco colonial. En concreto para «superar un marco colonial anclado en inercias de género o etnocéntricas» en los museos estatales que han lastrado a su juicio «la visión del patrimonio, de la historia y del legado artístico».
El ministro Urtasun sigue con su pensamiento, equivocado, de que España fue un país colonial, cuando nunca las tuvo. Todos los países que formaron parte de la Corona de España, desde la época de los Reyes Católicos, eran provincias. La única colonia fue el Sahara hasta 1968. Con lo cual, difícilmente los museos españoles pueden ser coloniales.
Cuando Urtasun habla de los museos nacionales hay que recordar una cosa: de la Administración General del Estado dependen 139 museos, entre ellos el Museo del Prado, el Reina Sofía o el Thyssen. ¿Todos ellos estarían anclados en «inercias de género o etnocéntricas»? Según el ministro sí; con lo cual tiene mucho trabajo por delante. Pero el ministro de Cultura no se refiere a estas pinacotecas, sino que habla de museos como el de Antropología o el de América cuando afirma la necesidad de un proceso de revisión. ¿Por qué?
Urtasun desea hacer una revisión del pasado histórico español y compararlo con lo que se hizo en Bélgica, que fundaron un museo exponiendo parte de las atrocidades llevadas a cabo en el Congo, sin tener en cuenta que ésta era un colonia privada de su Rey, Leopoldo II, y que en España nunca existió el concepto de colonia hasta que llegó el ministro Urtasun.
Tal vez el ministro Urtasun tendría que centrarse en todo lo que a España le han robado durante las guerras o colonizaciones
Para entenderlo veamos las colecciones que hay en los dos museos y que salen referenciados en las páginas web del Ministerio de Cultura. En el Museo Nacional de Antropología podemos leer que «las colecciones americanas del Museo corresponden en su mayoría a piezas procedentes de distintas culturas amazónicas de Perú, Ecuador, Brasil, Colombia y Venezuela. Las más antiguas forman parte de las colecciones recogidas por la Comisión Científica del Pacífico (1862-1865)». Además de tener colecciones africanas, europeas, oceánicas y asiáticas.
Por su parte, en la web del Museo de América leemos que «las colecciones más antiguas del Museo de América proceden del Real Gabinete de Historia Natural de Carlos III (1771), cuyo origen se remonta a la donación de parte del gabinete del ecuatoriano Pedro Franco Dávila. A este se incorporaron piezas procedentes de las primeras excavaciones arqueológicas realizadas en América así como objetos etnográficos recogidos en las expediciones científicas».
Dentro de este museo encontramos el conocido Tesoro de Quimbaya, un conjunto de objetos de oro y tumbaga encontrado formando parte del ajuar de dos tumbas de esta cultura precolombina, que fue obsequiado por el presidente de Colombia a la Corona Española a finales del siglo XI. ¿Una donación o regalo se puede considerar colonización?
Si nos ponemos tan estupendos con lo que es o no colonización, tal vez el ministro Urtasun tendría que centrarse en todo lo que a España le han robado durante las guerras o colonizaciones. Y se podría entrar en el National Gallery, del Hermitage o del Louvre, que poseen las mejores colecciones expoliadas de arte español.
Lo único que uno puede esperar es que las palabras se las lleve el viento y que el plan del ministro Urtasun sea una cortina de humo para esconder otras debilidades
Cuando se habla de «marco colonial» o «descolonización» perdemos la perspectiva del tiempo. Uno puede entender que, por ejemplo, en el Museo Arder en Bañalas se dejara de exhibir el bosquimán que había disecado. Esto no es descolonización, simplemente modernizar un hecho que no tenía importancia o era natural a principios del siglo XX, pero que hoy en día chirría. Lo mismo ocurre con los restos óseos de John Merrick, que fueron expuestos en el Royal Hospital de Londres durante años. Todo esto forma parte de una época y un tiempo.
Ahora bien, cuando un tesoro es entregado a los monarcas, cuando España nunca tuvo colonias, cuando los museos tampoco han estado colonizados, cuando en ellos se explica una historia que de no estar en los museos hubiera desparecido, cuando se es políticamente correcto en los museos al exponer las colecciones que tienen en depósito, hablar de «marco colonial» no deja de ser una afirmación sectaria y carente de sentido. Lo único que uno puede esperar es que las palabras se las lleve el viento y que el plan del ministro Urtasun sea una cortina de humo para esconder otras debilidades o la política que está llevando a cabo el actual Gobierno del PSOE y Sumar.