La no tan conocida estatua de la Libertad de Madrid que es más antigua que la de Nueva York
En el Panteón de España se encuentra una escultura de dos metros que representa la Libertad del escultor Ponciano Ponzano
Tal vez la Estatua de la Libertad de Nueva York sea uno de los monumentos más reconocidos por todo el mundo con su distintivo color y porte. Fue un proyecto conjunto entre Francia y los Estados Unidos: el país europeo se encargaría de construir la escultura de cobre que representaría a una mujer levantando una antorcha mientras que el gigante norteamericano se encargaría de construir su pedestal. Un monumento que simboliza la libertad y la emancipación, así como la amistad entre ambas naciones.
Pero ya existía una «Libertad Iluminando al Mundo» más de dos décadas antes de la que se erige en el sur de la isla de Manhattan, junto al río Hudson. Ésta se encuentra en uno de los muchos rincones escondidos de Madrid, concretamente en el Panteón de España y data de 1853. Fue una obra del escultor aragonés Ponciano Ponzano para conmemorar la libertad y los ideales republicanos que se estaban asentado por aquellos años en España.
Según el historiador Fran Navarro en su artículo sobre esta pieza del siglo XIX en Muy Interesante, Ponzano reflejó a través de esta figura femenina el deseo de cambio y libertad que se respiraba en Europa tras las revoluciones de 1848, un periodo que en España estuvo marcado por una intensa lucha política y social, con movimientos que fluctuaban entre monarquías conservadoras y emergentes ideas republicanas.
Por ello, la estatua del escultor zaragozano esculpida en mármol de Carrara, muestra a una figura femenina «joven, gallarda, ligeramente vestida, con rayos de luz refulgiendo de su pelo», en palabras del escultor. De dos metros de altura, la dama madrileña porta un cetro en la mano derecha, emblema de autoridad y poder, mientras que en su mano izquierda sostiene un yugo roto a la vez que lo pisa, un acto que representa el fin de la opresión. El alto grado de simbolismo de la estatua se complementa con su discreta, pero significativa localización.
Corona el mausoleo conjunto del antes conocido Panteón de los Hombres Ilustres. Este mausoleo neobizantino está formado por un cuerpo cilíndrico cubierto por un tejado jónico, coronado por la alegoría de la Libertad esculpida por Ponzano. Completan el monumento a la libertad –como se conoce popularmente– otras tres estatuas de Medina que representan la Pureza, el Gobierno y la Reforma y que se apoyan sobre los sarcófagos de Mendizábal, Argüelles y Calatrava, para cuyos restos estaba destinado el monumento. Aunque, más tarde también acogió los de Muñoz-Torrero, Martínez de la Rosa y Olózaga.
Este monumento a la libertad fue inaugurado, por suscripción popular, el 20 de febrero de 1857 en el desaparecido cementerio de San Nicolás y trasladado al jardín del panteón en 1912. Algunos historiadores y expertos del arte sugieren que Frédéric Auguste Bartholdi, el diseñador de la Estatua de la Libertad neoyorkina se pudo inspirar en la obra del escultor español, realizada más de dos décadas antes, para crear su representación de la libertad en un intercambio cultural y artístico.