Héroes, misioneros y un rey: los españoles que aún están presentes en el Capitolio de EE. UU.

La huella de España en Estados Unidos es mucho más profunda de lo que se piensa. Ya lo decía alto y claro el historiador y periodista Charles Lummis cuando afirmaba en su obra Los Exploradores españoles del Siglo XVI que «si no hubiera existido España hace cuatrocientos años, no existirían hoy los Estados Unidos».

Y esta estrecha relación, que algunos intentan borrar, la podemos descubrir, entre otros lugares, en el Capitolio de Estados Unidos, uno de los grandes símbolos de la democracia estadounidense y centro de la actividad legislativa y política del país. En este monumento que recibe millones de visitantes cada año «hay importantes referencias a la huella española de Estados Unidos», según afirma Daniel Ureña, presidente del Think tank The Hispanic Council que vela por difundir la herencia cultural hispana de Estos Unidos.

Tras el informe publicado en 2019 en el que subrayaba el legado español en los símbolos de Estados Unidos, en 2021 divulgaba otro sobre la herencia española en el Capitolio de Estados Unidos, donde recogen los principales elementos que se pueden observar y explican por qué se encuentran decorando salas y alrededores del lugar donde el Senado y la Cámara de Representantes se reúnen para discutir, debatir y deliberar la política nacional.

Bernardo de Gálvez

Quizá la representación más conocida de un español en las paredes del Capitolio sea la del malagueño Bernardo de Gálvez que desde 2014 adorna el Senado de Estados Unidos. Fue hijo de militar, destacando desde muy joven en el ejército español. En 1776 fue nombrado gobernador de Luisiana y desde entonces se esmeró por intensificar su defensa ante la amenaza británica en los dominios españoles a la vez que prestaba ayuda «decidida, temprana y eficacísima a la causa de la independencia norteamericana», recoge la Real Academia de la Historia en su Diccionario biográfico

Su participación en la guerra de independencia de las 13 Colonias fue crucial: consiguió victorias en emplazamientos claves como Pensacola o Mobila, que contribuirían de manera decisiva a la independencia estadounidense.

«Dada su relevancia los Padres Fundadores de Estados Unidos aprobaron en el Congreso homenajear a Bernardo de Gálvez, protagonista de la historia y formación del país, colgando uno de sus retratos en el Congreso junto al de otras figuras históricas como la de Thomas Jefferson o George Washington», indica el documento de The Hispanic Council; sin embargo, no se llevó a cabo hasta el año 2014.

Además, Bernardo de Gálvez cuenta con el título de Ciudadano Honorario de Estados Unidos, la mayor distinción que se concede en este país a una personalidad extranjera y título que comparte con Winston Churchill o la Madre Teresa de Calcuta.

Fray Junípero Serra

El Capitolio tiene una sala conocida como National Statuary Hall («Salón Nacional de las Estatuas») donde cada estado de Estados Unidos envió dos estatuas de personas relevantes en su historia para que su legado fuera recordado en este importante edificio. En la actualidad la sala alberga 100 estatuas entre las que se encuentra la del franciscano Junípero Serra en representación de California.

Fray Junípero se embarcó en 1749 junto a otros 20 religiosos rumbo a américa con la misión de evangelizar el recién descubierto territorio. Su primer destino fue México, desde donde se trasladó a Sierra Gorda donde realizó su apostolado con los indios Pame durante ocho años.

Aprendió la lengua de los lugareños para dar a conocer entre ellos la religión cristiana, fomentó la agricultura y el comercio y desde su llegada dedicó los siguientes 15 años de su vida a la labor evangelizadora y acometió la fundación de nueve misiones, ocho de ellas en California. La estatua hecha de bronce se entregó en 1931 y «simboliza tanto su entrega a las comunidades a las que sirvió, como su aportación crucial al desarrollo inicial de California, estableciendo el sistema de misiones que fue el germen de lo que hoy es el estado», recoge el estudio.

Tal fue su entrega, que el Papa Francisco le canonizó, convirtiéndose así en el primer santo hispano de Estados Unidos. El Papa afirmó que este franciscano español «buscó defender la dignidad de los indígenas que evangelizó».

Alfonso X el Sabio

Además de contar con cuadros y esculturas, en el Capitolio hay 23 retratos en relieve de mármol sobre las puertas de la galería de la Cámara de Representantes que conmemoran a «figuras históricas destacadas por su trabajo en el establecimiento de los principios que subyacen a la ley americana», explica el informe. Estos relieves fueron instalados cuando la estancia fue remodelada entre 1949-50.

Entre esas figuras históricas está la de un rey español, Alfonso X el Sabio, no solo por la «importante presencia española en lo que es hoy Estados Unidos», sino que se incluya a este rey español es el reconocimiento «al legado jurídico que España dejó en muchos territorios del país».

«Durante el mandato de Alfonso X el Sabio se redactaron un cuerpo de leyes conocidas como las 'Siete Partidas'. Es importante destacar que dichas leyes se instituyeron también en los territorios americanos realizando las adaptaciones necesarias a lo largo del tiempo», subraya el documento. Incluso después de la independencia, las normas españolas que habían regido los territorios no desaparecieron. Así podemos encontrar multitud de sentencias en Luisiana, Texas, Arizona, Nuevo México y California que citaban las Siete Partidas en sus Cortes Supremas.

Junto al rey español aparecen otros personajes históricos como Napoleón Bonaparte, Thomas Jefferson, Eduardo I de Inglaterra o George Mason, que fueron elegidos por académicos de la Universidad de Pensilvania y de la Sociedad Histórica de Columbia de Washington, D.C., en colaboración con miembros autorizados de la Biblioteca del Congreso.

La rotonda del Capitolio

Como vemos, la herencia española ocupa un lugar muy importante en el Capitolio. Esculturas, cuadros y grabados conforman las referencias a los más de 300 años de presencia española en Estados Unidos. Pero no termina con estas tres grandes figuras españolas de la historia. En el corazón del edificio se adorna con ocho grandes pinturas históricas.

«Tal es la importancia de esta ubicación que allí se realiza la capilla ardiente de grandes figuras públicas de Estados Unidas», destaca The Hispanic Council. Entre esos cuadros están la representación del Descubrimiento del Mississippi por Hernando de Soto así como La llegada de Colón a América.

Si permanecemos en la rotonda del Capitolio, pero alzamos la vista podremos encontrar el «Friso de la historia americana» compuesto de 19 grandes eventos de los cuales cuatro hacen referencia a la historia de España. Se vuelve a representar al almirante a su llegada al Nuevo Mundo y al explorador extremeño en el momento de su funeral, en el que su cuerpo fue sumergido en el río que descubrió. Completan la referencia a España el encuentro entre Hernán Cortés y Moctezuma II en 1519, y Francisco Pizarro en su marcha hacia Perú.

Cristóbal Colón tiene especial protagonismo en el Capitolio pues además de las referencias ya mencionadas, el almirante tiene una puerta propia en la que se muestran nueve escenas de la vida del descubridor de América.

Las misiones españolas

"El sistema de misiones que España implementó en Norteamérica fue una pieza clave para el asentamiento y desarrollo de diferentes zonas de lo que hoy es Estados Unidos. Basta con recordar las 21 misiones que se crearon en

la Alta California, configurando el nacimiento de grandes ciudades que conocemos en la actualidad. Por ello, dada su relevancia, Evergreene Painting Studios realizó entre 1993 y 1994 esta creación en la que se realza la figura de las misiones españolas en Estados Unidos", se puede leer en el estudio que realiza el think tank.

Además de resaltar el papel fundamental de estas misiones evangelizadoras, en el Capitolio encontramos una pintura de Bartolomé de las Casas y una estatua del jesuita italiano Eusebio Kino que trabajó bajo bandera del Imperio español en América. El primero aparece representado en su escritorio acompañado de un nativo mirando por una ventana a los pueblos nativos cuya esclavitud denunció, continúa el informe. Se puede encontrar su representación en el pasillo de Brumidi. Mientras que la estatua del segundo se encuentra en la National Statuary Hall y fue otorgada por el estado de Arizona.

Todo esto es «una muestra más de la extensa vinculación histórica y cultural que une a España y Estados Unidos, una relación que debe continuar dándose a conocer y fortaleciéndose», concluye el documento.