Ecuador
La oposición ecuatoriana intenta acorralar al presidente Lasso por los papeles de Pandora
El mandatario defendió el origen de su patrimonio como producto del «esfuerzo de más de 40 años»
La comisión de la Asamblea Nacional que investiga al presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, por los papeles de Pandora comenzará el lunes a escuchar testimonios de los más de cuarenta testigos que piensa convocar, entre ellos la esposa y al menos un hijo del mandatario.
Así se resolvió en una reunión este jueves de la Comisión de Garantías Constitucionales de la Asamblea, presidida por José Cabascango, del partido indigenista Pachakutik, en la que se debatió el plan de trabajo para la investigación del caso según reporta EFE.
La investigación espera concluir su informe el 6 de noviembre, para verificar si el presidente violó la ley que se desprende de la consulta popular de 2017 en la que se prohibió a los funcionarios públicos y políticos electos tener propiedades en paraísos fiscales.
En un principio la comisión que debía haber tenido la potestad de la investigación era la de Fiscalización, pero la Asamblea decidió derivarla a la de Garantías Constitucionales, en un movimiento político de la oposición, mayoritaria, que tiene a más miembros en esta última.
El objetivo -según los diputados opositores- será esclarecer si Lasso aún mantiene propiedades en paraísos fiscales, prohibido por ley desde 2017, o si incurrió en la evasión fiscal.
Lasso se defiende
En su cuenta de Twitter, el presidente Lasso afirmó «la información del SRI - Servicio de Rentas Internas- es pública. Entran a su página web y verán la información completa. En 15 años he pagado USD 588 millones. Ahí podrán ver mi historial tributario y mi relación con el Estado ecuatoriano».
El mandatario defendió el origen de su patrimonio como producto del «esfuerzo de más de 40 años» y agregó que lo que no puede estar en duda es que «mi esposa y mis hijos, cuando ellos reciban el patrimonio, tienen la libertad de hacer lo que a ellos les parezca, no lo que les diga un político corrupto».
Finalmente Lasso criticó que «es incompresible que ciudadanos que no pagan impuestos, que no declaran, pretendan cuestionar un patrimonio bien justificado, fruto de trabajo honesto. Aquí uno cumplió con la ley y siguió el debido proceso, siempre de forma transparente.»