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Rodolfo Martín Villa, en 2019

Rodolfo Martín Villa, en 2019EP

Martín Villa recurrirá el auto de su procesamiento y la fianza ante la Cámara de Apelación argentina

Una jueza argentina le procesa por supuestos crímenes entre 1976 y 1978, concretamente delitos de genocidio y crímenes de lesa humanidad 

La jueza argentina María Servini ha procesado al ex ministro de Interior Rodolfo Martín Villa por crímenes del franquismo acaecidos entre 1976 y 1978.

Fuentes cercanas al exministro han informado a EFE de que recurrirá ante la Cámara de Apelación argentina el auto de su procesamiento, así como la fianza impuesta.

La jueza ha dictado el auto de procesamiento doce meses después -debía haberlo hecho en un plazo de 10 días, según las leyes argentinas- de que Martín Villa declarase voluntariamente ante ella por videoconferencia, según las mismas fuentes.

Los abogados del exministro habían requerido recientemente a la jueza para que tomase, sin más dilación, la decisión de sobreseimiento a la vista del relato de Martín Villa en su declaración. Como indican a EFE las mismas fuentes, varias de las muertes de las que se le responsabiliza se produjeron en marzo de 1976, cuando él era titular de Relaciones Sindicales, sin competencia sobre la Policía. El 3 de marzo de 1976 era ministro de Gobernación Manuel Fraga, de viaje en Alemania, y Adolfo Suárez ministro de despacho.

Martín Villa, de 87 años, será procesado por las cinco muertes durante los sucesos del 3 de marzo de 1976 en Vitoria, provocadas por un desalojo policial en una huelga, la muerte de Germán Rodríguez en los Sanfermines de 1978 en un operativo policial o el asesinato de un joven en Madrid por parte de los Guerrilleros de Cristo Rey, una organización terrorista.

La magistrada ha dictado prisión preventiva para el exministro, que no será cumplida de forma efectiva, así como el embargo de una «suma millonaria».

Exministro franquista y de Suárez

Martín Villa fue uno de los políticos más destacados tanto en la dictadura franquista como en la Transición.

Durante su etapa en Interior, en concreto en 1976, lideró alguno de los actos por los que se le ha juzgado como la «disolución violenta» de algunas manifestaciones, lo que le valió el calificativo peyorativo de «la porra de La Transición» por parte de sus críticos.

Dejó la política en un primer momento en 1979, aunque regresaría un año después para formar parte del equipo de Adolfo Suárez. El desplome de UCD le llevaría a ingresar en las filas del PP, donde puso fin a su trayectoria en este campo.

División de opiniones

La política española siempre se ha mostrado muy dividida en torno a su causa judicial, que lidera Argentina. Si bien los ex presidentes del Gobierno González, Aznar, Zapatero y Rajoy han criticado su causa abierta y han abogado por destacar su papel para impulsar la Transición, Unidas Podemos y los independentistas han mostrado sus deseos de que sea condenado.

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