Ucrania
Crucial reunión entre Biden y Putin al son de tambores de guerra en Ucrania
Los expertos alertan de la presión del Kremlin: «Si la OTAN no ofrece garantías, Rusia invade Ucrania»
La anticipada reunión virtual entre el presidente de Estados Joe Biden con su homólogo ruso Vladimir Putin enfrentará a los dos líderes, mientras manifiestan sus mutuas sospechas, bajo el marco urgente de una posible invasión rusa en Ucrania.
El presidente ruso protagoniza un ferviente debate de interés mundial; frente a un evidente agrupamiento de tropas rusas en su frontera con Ucrania, sumando ya 94.000 unidades, y el despliegue de un arsenal de armamento que incluye artillería pesada y sistemas portátiles de misiles antiaéreos, la comunidad internacional teme la escalada a un conflicto de guerra en abierto.
La magnitud del despliegue junto a Ucrania alerta a Washington, que no ha tardado en posicionarse como defensor de la soberanía del territorio ucraniano. Son los servicios de inteligencia estadounidenses los que señalaron la amenaza internacional que supone la ofensiva rusa:
«No compartiré que es lo que estamos registrando, o los indicadores y advertencias desde el servicio de inteligencia, pero damos seguimiento a todo», compartió el general Mark Milley. «Y hay suficiente ahí fuera ahora mismo para causar mucha preocupación».
Creo que no tienes alma
Sabemos que Estados Unidos tiene imágenes de satélite del agrupamiento de tropas y armamento ruso junto a la frontera este de Ucrania, deduciendo que los planes de Rusia incluyen el movimiento de fuerzas hacia y desde la frontera para «crear incertidumbre y ofuscar intenciones».
El documento facilitado por los servicios de inteligencia delinea la posición de lo que oficiales describen como «100 batallones tácticos», así como cantidades de armamento pesado, artillería, y demás equipamiento.
Crece la incertidumbre entre analistas y diplomáticos, que dudan de las intenciones de Putin. Bien podría ser que busque una ofensiva fronteriza con el objetivo de invadir Ucrania, pero también es posible que quiera presionar a Joe Biden para que la antigua región soviética, Ucrania, no se convierta en base militar para la OTAN.
El tenso pasado de Biden y Putin
Se conocieron en persona en 2011, en el Kremlin. Entonces, Joe Biden era vicepresidente en el Gobierno de Obama. Tras la reunión, el estadounidense se presentó frente a Putin y le dijo: «Creo que no tienes alma».
«Tu y yo nos entendemos», fue la respuesta de Putin.
Putin ha subido las apuestas. Ya no está fingiendo. Se dispone a dar un paso desesperado
No volverían a verse hasta 2014, en Ginebra, para abordar por primera vez el asunto de la presión militar rusa sobre Ucrania. Se volvieron a ver el junio pasado, en la misma ciudad, con Biden ya como presidente.
Continúan desde entonces tanto el contacto como la presión.
El pasado viernes, Joe Biden prometió ponerle las cosas «muy, muy difíciles» a Putin si intentaba desplegar una invasión, sin llegar a especificar cómo. Por su parte, el presidente ruso advirtió a Occidente sobre el peligro de cruzar «las líneas rojas» del Kremlin, que incluyen la producción de armamento en Ucrania.
«No aceptaré las líneas rojas de nadie», contestó Joe Biden.
Garantías de la OTAN o invasión
En una declaración que la Casa Blanca compartió, este fin de semana, su secretaria de prensa Jen Psaki explicó que Joe Biden «delineará las preocupaciones de Estados Unidos sobre las actividades militares en la frontera con Ucrania, y reafirmará el apoyo de nuestro país a la soberanía e integridad territorial ucraniana» durante su llamada con el presidente ruso.
Pero son pocos los expertos que consideran la amenaza de Vladimir Putin un simple farol:
«Putin ha subido las apuestas. Ya no está fingiendo», explica Tatiana Stanovaya, fundadora del centro de consultoría política R.Politik. «Se dispone a dar un paso desesperado».
Si la OTAN no ofrece garantías, Rusia invade Ucrania
Esa gran preocupación que desespera a Rusia es la creciente amistad entre Ucrania y la OTAN; el Kremlin busca cortar de raíz cualquier alianza, a través de presión y amenazas agresivas. Siguiendo órdenes de Putin, el ministro de Exteriores Serguei Lavrov pidió a Anthony Blinken, su homólogo estadounidense, «garantías de seguridad» y la certeza de que la OTAN no se acercaría a la frontera rusa.
Stanovaya percibe en ese miedo un resumen de la situación: «Si la OTAN no ofrece garantías, Rusia invade Ucrania».
Ucrania cuenta que Rusia ha desplegado vehículos armados, sistemas de armamento electrónicos, y cerca de 94.000 tropas junto a la frontera que comparten. Citando informes de su inteligencia, el ministro de Defensa ucraniano Oleksii Reznikov alertó de que Moscú podría estar organizando una ofensiva militar para finales de enero. Rusia niega cualquier intención de tal naturaleza, responsabilizando en su lugar a Ucrania de un incremento de tropas militares.