'Build Back Better', el «fracaso» de Biden de casi dos billones de dólares

Durante su primera rueda de prensa de 2022, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, admitió el fracaso del plan «Build Back Better». Se trataba de una ambiciosa reforma social valorada en dos billones de dólares. Por desgracia para Biden, quedó claro que el plan no sería aprobado en el Senado, y el presidente se ha resignado a «desmontarlo» y aprovechar aún así ciertas partes del paquete.

El plan «Build Back Better» tenía por objetivo potenciar la educación, los cuidados sociales, y la lucha contra el cambio climático. Pretendía ampliar los programas dirigidos a menores y ancianos, y destinar 550.000 millones de dólares a la crisis del calentamiento global. El coste económico de la iniciativa, que según la Oficina de Presupuestos del Congreso, habría añadido 367.000 millones de dólares al déficit durante los próximos diez años, era particularmente ambicioso. Fueron los propios demócratas quienes consideraron este precio demasiado elevado.

El senador Joe Manchin, de West Virginia, y la senadora Kyrsten Sinema, de Arizona, lideraron esta «rebelión» contra el plan de Biden, y dejaron claro que no progresaría en el Senado, donde es necesaria una mayoría de votos. No es la primera vez que Manchin y Sinema, demócratas, se oponen al líder de su partido; son también responsables de votar en contra de la eliminación del filibusterismo, decisión que ha costado a Biden su propuesta de reforma electoral.

Aún así, el presidente confía en poder llevar a cabo ciertas partes de su plan, al desmontarlo en pedacitos atractivos para sus demócratas. «Me consta que vamos a tener que deshacerlo», admitió Biden durante la rueda de prensa, que marca el final de su primer año en la presidencia. Celebró sin embargo que Manchin y Sinema apoyarían muchos de los elementos del paquete.

«Creo que está claro que podremos lograr el apoyo necesario para invertir 500 millones de dólares en energía y medio ambiente. Además, Joe Manchin apoya fuertemente la educación… Así que creo que podemos separar el plan, conseguir lo que podamos de momento, y volver a luchar por todo lo demás más adelante», concedió el presidente.

Este fracaso se suma al revés de la reforma electoral, y ambos marcan fuertemente la presidencia de Joe Biden. A principios del año, el presidente trató por todos los medios de aprobar una reforma electoral que ampliaría los requisitos de registro para votar y acabaría con una supuesta discriminación del voto. Sin embargo, Biden sabía que los republicanos del Senado iban a rechazar la nueva ley, por lo que primero propuso eliminar el filibusterismo, mecanismo que requiere una mayoría para aprobar leyes en la Cámara, actualmente dividida 50-50. Manchin y Sinema se negaron al cambio, entorpeciendo mucho las cosas para Biden.