75 días de guerra
Ben Wallace, ministro de Defensa británico: «Putin debe sufrir el mismo destino que los nazis»
El ministro británico exige que se juzgue al presidente ruso y a sus generales por los crímenes de guerra en Ucrania
Rusia celebra su esperado «Día de la Victoria», a pesar del escaso éxito en Ucrania. En rigor se trata de conmemorar el fin de la Segunda Guerra Mundial, el triunfo de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi. Sin embargo, Reino Unido ha sugerido que, en esta ocasión, Moscú pertenece más bien al bando de los nazis.
Durante un discurso, que coincide con la celebración del desfile militar ruso, Ben Wallace, secretario de Defensa británico, declaró que el comportamiento de Vladimir Putin, de su circulo íntimo, y de sus generales, «refleja el fascismo de los nazis».
El británico agregó que Putin «debe sufrir el mismo destino que Hitler», es decir: derrotado, juzgado, rechazado por la comunidad internacional, y antagonista oficial de uno de los peores episodios de la historia de Europa. Según Wallace, Putin tendrá que adquirir el mismo estatus de paria y ser considerado igual de malvado.
Wallace, en su discurso en el Museo Nacional del Ejército, pretende contrarrestar la narrativa de Putin, que aún insiste en que Rusia está llevando a cabo «una operación especial» para «desnazificar Ucrania».
Los generales rusos deberían ser procesados por «traicionar» a los soldados bajo su mando. Además, Wallace acusa a Putin y a los suyos de «repetir los errores de los regímenes totalitarios del siglo pasado», por lo que «su destino debería ser el mismo».
Sus palabras huelen a amenaza: durante los juicios de Nuremberg, los líderes de la Alemania nazi fueron procesados por sus crímenes de guerra y contra la humanidad. Las autoridades ejecutaron a diez de ellos.
Los principales militares de Rusia, ataviados con sus «impolutos uniformes de desfile», son «cómplices totales» en la invasión de Putin a Ucrania, y son culpables de las pérdidas en ambos bandos. Por ello, deben responsabilizarse por su «incompetencia» y comparecer ante un tribunal.
Liz Truss, ministra de Asuntos Exteriores, apoyó la moción de su compañero. Tras el bombardeo en el este de Luhansk, en el que murieron 60 civiles refugiados dentro de una escuela, acusó de nuevo a Rusia de «crímenes de guerra» por los que debe hacerse justicia.