Eric Greitens, exgobernador de Misuri y precandidato republicano al Senado EE.UU.
Estados Unidos
Un precandidato al Senado de EE.UU. promete cazar a los 'falsos republicanos'
El ex gobernador de Misuri y precandidato al Senado en las primarias republicanas, Eric Greitens, promete una casería de colegas de partido
Las primarias republicanas del Estado de Misuri han subido de tono de mano del candidato pro-Trump Eric Greitens. En medio de una ola de masacres por armas de fuego, la campaña del republicano 'auténtico' ofrece acabar con los oponentes que no considera suficientemente conservadores.
Greitens protagonizó un anuncio que presentaba a un grupo de hombres armados al estilo militar que asaltaban una casa en busca de «Rinos», o «Republicanos solo de nombre», una frase utilizada para describir a aquellos en el partido que no se consideran lo suficientemente conservadores.
El precandidato republicano es un fiel aliado de Donald Trump y en un vídeo publicado en Twitter se mostró disparando junto con el hijo del expresidente. «Infundir miedo en los corazones de los liberales [demócratas], los RINO y los medios falsos. Es hora de hacer grande a Estados Unidos otra vez, otra vez» publicó Greitens.
El ex Navy Seal, de 48 años, arremete constantemente contra sus compañeros de partido. «El Rino se alimenta de la corrupción y está marcado por las rayas de la cobardía» apunta Greitens tratando de denigrar a sus oponentes y arroparse de los apoyos del ala radical del partido.
Una «metáfora»
Acusado de supuesta violencia sexual
El exmilitar se postula en las primarias republicanas para un escaño en el Senado por Misuri y previamente renunció a su cargo de gobernador en 2018 en medio de denuncias de mala conducta sexual y financiera.
Greitens era una estrella en ascenso en el partido republicano antes de que su carrera se descarrilara en 2018. Fue acusado de tener una aventura con su ex peluquera y supuestamente le tomó una foto desnuda sin su consentimiento antes de amenazar con compartirla si ella alguna vez le contó a alguien sobre su relación.
También supuestamente obligó a la mujer a tener sexo oral. Insistió en que no había cometido ningún delito, pero renunció citando la presión que el escándalo ejerció sobre su familia. Finalmente, Greitens se divorció de su esposa en 2020 y desde entonces ella lo acusó de abuso doméstico.
