148 días de guerra en Ucrania
Hungría prohíbe que pase armamento por su territorio para ayudar a Ucrania
Hungría mantiene su difícil equilibrio entre la Unión Europea y su afinidad con el gobierno de Vladimir Putín.
El presidente, Viktor Orbán, no está entusiasmado con las sanciones de Occidente a Rusia, pero tampoco con una guerra que provoca, además de hambre y miseria, una crisis que afecta a todo el continente y a medio mundo.
El martes, -informa Kiev Post- se publicó una información donde se aseguraba que el gobierno de Budapest estaba dispuesto a modificar su política y permitir el tránsito de armas, pero el Ejecutivo ha echado por tierra cualquier expectativa en ese sentido.
Los medios de comunicación apabullaron al Gobierno pidiendo aclaraciones por el asunto. Finalmente, un día más tarde, el Ministerio de Asuntos Exteriores les sacó de dudas.
No permitiremos el tránsito de armas ni que crucen la frontera entre Hungría y Ucrania
Péter Szijjártó, titular de Exteriores, difundió el siguiente comunicado: «La postura de Hungría sobre la entrega de armas ha sido clara desde el principio: no enviaremos a nuestros soldados, ni armas».
A renglón seguido, el comunicado añadía: «No permitiremos el tránsito de armas ni que crucen la frontera entre Hungría y Ucrania.»
La seguridad de Transcarpatia
El mensaje insiste en que, «nuestra postura se mantiene intacta. Todas las demás noticias que afirman lo contrario no reflejan la realidad». Dicho esto, justifica su posición porque un cambio de la misma, «socavaría la seguridad de Transcarpacia y pondría en riesgo al pueblo húngaro».
Hungría limita con la región ucraniana de Transcarpatia. Su posición geoestratégica en el conflicto podría, de aprovecharse, ser muy beneficiosa para la defensa de su vecino.
En ese enclave viven 150.000 ucranianos con pasaportes húngaro concedidos durante el gobierno de Viktor Orban. Esto es, el primer ministro húngaro los considera a todos los efectos, compatriotas suyos.
Al margen de la guerra, las relaciones entre el gobierno de Viktor Orban y el de Volodimir Zelenski son tensas por, entre otras razones, cuestiones ideológicas.
En Budapest no se entiende el sistema de educación y critican que se margina a los ciudadanos húngaros de Transcarpatia o Transcapartia. Esa misma crítica es la que hace Rusia, en especial, en la región ocupada del Donbás donde hay una mayoría de habitantes de habla rusa.
Ucrania reitera que eso no son más que excusas ya que la verdadera razón para no ayudarles y bloquear un pasillo clave para su defensa, se encuentra en la estrecha amistad que mantienen Vladimir Putin y Viktor Orban.