Díaz-Canel busca ayuda en China para superar la debacle de Cuba
el heredero de la dictadura castrista, Miguel Díaz-Canel, llegó la madrugada de este viernes a China como última parada de una gira internacional para buscar ayuda financiera ante la ruina en la que se encuentra Cuba.
Tras visitar, Argelia, Turquía y Rusia, Díaz Canel desembarcó en Pekín en un enorme avión de la compañía venezolana Conviasa, seguramente cedido para esta gira internacional por el dictador venezolano Nicolás Maduro.
Una semana después de salir de la isla caribeña, que enfrenta escasez de alimentos y constantes fallas del sistema eléctrico, Díaz Canel fue recibido por Xi Jinping, quien le expresó que el país asiático «no cambiará» su política de «amistad» con Cuba ni su «voluntad de trabajar» con la nación caribeña para «oponerse a la hegemonía».
El dictador cubano aseguró que valora «de forma muy positiva» los «aportes teóricos y prácticos a la construcción del socialismo» por parte de Xi al frente del Partido Comunista Chino.
El viaje de Díaz-Canel a China marca el primero de un «mandatario» hispanoamericano al país asiático desde la finalización del XX Congreso del Partido Comunista Chino, celebrado en octubre y en el que Xi fue reelegido para un inédito tercer mandato como secretario general del partido.
«Ensanchar la cooperación práctica»
El líder chino expresó la disposición de Pekín a «profundizar la confianza política mutua y ensanchar la cooperación práctica» con La Habana y señaló que las relaciones bilaterales son «un caso ejemplar de la solidaridad y cooperación entre países socialistas y de sincero apoyo entre países en desarrollo».
Tras la reunión, se firmaron doce documentos, entre los cuales figuraban un memorando de entendimiento para la promoción de las Nuevas Rutas de la Seda, el plan del régimen comunista de Pekín que busca construir infraestructuras en más de 60 países y un memorando para el «fortalecimiento de la cooperación económica y comercial» entre ambas naciones.
Asimismo, se organizó una ceremonia de entrega de materias primas, uniformes escolares, donaciones en efectivo, insumos médicos y medicamentos para Cuba, que atraviesa uno de los peores momentos económicos en décadas como parte de su crisis crónica desde que los comunistas controlan con mano de hierro la isla.
La visita previa de Díaz Canel a China, primera como presidente designado por la dictadura castrista, tuvo lugar en noviembre de 2018 y duró tres días y en ella también se reunió con Xi arrancándole promesas similares como las escuchadas el día de hoy.