López Obrador asegura que México es «más seguro» que EE.UU. pese al brutal secuestro de Tamaulipas
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este lunes que su país es «más seguro» que Estados Unidos, pese al reciente secuestro de cuatro ciudadanos de ese país, dos de los cuales murieron en cautiverio.
«Es más seguro México que Estados Unidos y no hay ningún problema para viajar por México con seguridad», sostuvo López Obrador durante su habitual conferencia de prensa.
El mandatario izquierdista hizo la comparación al ser interrogado sobre las alertas de Washington para que los estadounidenses eviten viajar o extremen precauciones en 30 de los 32 estados mexicanos.
Tras el secuestro en Matamoros, en el Estado de Tamaulipas, legisladores republicanos propusieron que Estados Unidos use al Ejército para combatir a los narcotraficantes incluso en territorio mexicano.
Algunos congresistas estadounidenses del mismo partido también proponen designar como «terroristas» a los cárteles mexicanos abriendo así la puerta a una acción directa de Estados Unidos fuera de sus fronteras.
«¿Por qué esa paranoia?», lanzó el presidente, quien aprovechó la oportunidad para rechazar una vez más la idea de los congresistas estadounidenses.
«Es una campaña en contra de México de los políticos conservadores de Estados Unidos», afirmó el mandatario, quien el pasado viernes tachó de «mequetrefes» a esos legisladores y los acusó de hacer «politiquería» de cara a las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024.
La lucha contra el fentanilo
López Obrador recibió este lunes a un grupo de congresistas estadounidenses y al embajador de ese país en México, Ken Salazar, para explicarles sus esfuerzos contra el tráfico de fentanilo -opiáceo de alta letalidad- y abordar las controversias comerciales bilaterales.
El grupo de ocho legisladores, encabezado por el congresista republicano por Missouri Jason Smith, estuvo integrado por otros cinco representantes de ese partido y dos demócratas, informó la presidencia en un comunicado.
«Somos socios (...) para siempre. A veces hay inquietudes, desacuerdos, pero sabemos que estamos unidos», declaró Salazar a periodistas tras el encuentro.
En la cita, López Obrador explicó el «trabajo que ha venido haciendo México sobre todo en materia de fentanilo», indicó por su parte Roberto Velasco, representante de la cancillería mexicana.
La agencia antidrogas DEA ha exhortado al gobierno mexicano a «hacer más» contra el tráfico de fentanilo
El rechazo al 'intervencionismo' republicano de López Obrador fue transmitida este mismo lunes en Washington por el canciller al embajador y los 52 cónsules de México en Estados Unidos.
El canciller mexicano Marcelo Ebrard pidió a los funcionarios defender a su país con una campaña de información «ante los inaceptables ataques de legisladores y exfuncionarios del Partido Republicano», de acuerdo con un comunicado de la cancillería.
Secuestro y muerte en Tamaulipas
El pasado 3 de marzo, cuatro estadounidenses fueron secuestrados en la ciudad fronteriza de Matamoros, en el Estado de Tamaulipas por presuntos narcotraficantes.
Dos de los rehenes murieron en manos de sus captores al parecer por las heridas de bala que sufrieron al intentar fugarse poco después del rapto, mientras que otro sufrió una herida en la pierna. Los cuatro ya fueron repatriados.
Según las autoridades mexicanas, las víctimas cruzaron a Matamoros porque una de ellas planeaba realizarse una cirugía estética.
A raíz del incidente, Washington recordó la vigencia de una alerta de viaje a Tamaulipas, cuyas carreteras han sido escenario de múltiples delitos en los últimos años.
Si fuera cierto que no es seguro viajar a México, «no estarían llegando tantos estadounidenses a vivir» a México, manifestó el presidente, al reportar un aumento en la llegada de turistas a destinos como Cancún.
El canciller viajó el lunes a Estados Unidos para «informar» sobre cómo México atiende el problema de la inseguridad, en particular la lucha contra el fentanilo, droga sintética 50 veces más potente que la heroína, a la se atribuyen decenas de miles de muertes por sobredosis en Estados Unidos.