384 días de guerra en Ucrania
El jefe de la inteligencia militar ucraniana anuncia un rápido final de la guerra
El jefe de la inteligencia militar ucraniana, general Kyrylo Budanov, ha contradicho los informes de la OTAN, del Pentágono y de los servicios de inteligencia occidentales, que apuntan a una guerra larga de meses o años, y aseguró que la guerra en Ucrania «terminará en un tiempo bastante corto».
383 días de guerra en Ucrania
La batalla de Bajmut se encasquilla en el combate callejero con cada vez más muertos en ambos bandos
«No comparto la opinión de que este conflicto durará mucho por una simple razón: Rusia se ha dado cuenta de que no puede prolongarlo por mucho más tiempo. Con todas sus acciones, están tratando de demostrar que están listos para un conflicto a largo plazo, pero en realidad es exactamente lo contrario», aseguró durante una entrevista concedida al medio especializado en defensa The Cipher Brief.
En ese sentido, anunció una serie de batallas decisivas en los próximos meses que llevarán rápidamente al final de la guerra.
La referencia a las batallas «decisivas» inciden en la importancia que se le ha dado en ambos bandos a la ciudad de Bajmut y al resultado de la batalla por su control.
Durante la entrevista, en las oficinas de Budanov con las ventanas tapiadas con sacos terreros y los muros reforzados, a la periodista de The Cipher Brief le llama la atención una jaula con dos pájaros que contrasta fuertemente con el ambiente de guerra de la estancia.
«Son un detector vivo de sustancias venenosas», razona Budanov. «Se trata de aves muy sensibles. Ante la presencia mínima de una sustancia venenosa, morirán en el instante».
Su meticulosidad se muestra también en su modo de trabajar. Todos los informes de inteligencia que llegan a su mesa lo hacen en papel, nada de formatos digitales, mensajes o correos electrónicos.
«Es para evitar fuga de información. Sólo recibimos informes en papel. Los informes en papel sólo es posible obtenerlos físicamente, por lo que es casi imposible interceptarlos», señala.
Por otro lado, Budanov insistió en una predicción anterior: la guerra culminará con la reconquista ucraniana de Crimea.
«Todo comenzó allí, y terminará allí, con la recuperación de Crimea». Cualquier otro final –advirtió– sería un cierre en falso de la guerra, que volvería a retomarse en el futuro.
El general Budanov, de 37 años, se introdujo en el círculo íntimo del presidente ucraniano Volodimir Zelenski, donde se toman todas las decisiones respecto a la guerra, después de haber sido el único miembro de los servicios de inteligencia que acertó la fecha y hora en que se produciría la invasión rusa.
Mientras la mayor parte de los generales y oficiales de inteligencia defendían que la concentración de tropas rusas en las fronteras con Ucrania respondían a una estrategia de presión mediante ejercicios militares, Budanov fue el único que insistió en que se estaba ultimando una invasión.
«Solo confiaba en los hechos. Toda la información que teníamos, todos los datos disponibles, apuntaban a una invasión», afirmó.
Budanov también es célebre por ser el cerebro del ataque contra el puente de Krech, que une Crimea con Rusia, y por haber sobrevivido a numerosos intentos de asesinato.
En la conversación, hizo también un repaso a aquello que ha funcionado en la guerra contra Rusia y en lo que hace falta para derrotar al enemigo.
Destacó que la colaboración con las agencias de inteligencia occidentales se ha mostrado como enormemente efectivas en la guerra. «La cooperación con la comunidad de inteligencia militar y con Estados Unidos es de máxima prioridad para nosotros».
Reconoció, asimismo, que la cooperación con las agencias occidentales es bidireccional: «No sólo recibimos inteligencia. Ellos también reciben datos de nosotros. Se trata de una verdadera alianza».
Pidió una mayor agilidad en el acceso a las imágenes de satélite por parte de las tropas y respaldó a Zelenski en su demanda de aviones de combate.
«La defensa aérea nos permite proporcionar cobertura para operaciones ofensivas», argumentó.
En la entrevista resalta también la importancia de la información que proporcionan los prisioneros de guerra. Un ejemplo: la mayor parte de los soldados rusos hechos prisioneros en las últimas semanas pertenecen a la 155 brigada de Infantería de Marina.
El general Budanov también había sido elegido para sustituir al ministro de Defensa Oleksii Reznikov después de un escándalo de corrupción en el ministerio que afectó a algunos de sus más estrechos colaboradores.
Zelenski, sin embargo, mantuvo finalmente a Reznikov en su puesto y a Budanov como jefe de los servicios de inteligencia ucranianos.