Blinken llama por teléfono a Lavrov para que libere al periodista del Wall Street Journal detenido por espía

El asunto se está enredando mucho más de lo que se imaginaba al principio. La detención de Evan Gershkovich, el enviado especial del Wall Street Journal, acusado de espionaje, ha desatado una ola de solidaridad en Estados Unidos con el diario, posiblemente, más riguroso de los que hay en el continente.

En simultáneo, las sospechas de que el periodista pudiera ser un espía, parecen quedar descartadas aunque esta profesión es de la más atractrivas para los servicios de inteligencia de todo el mundo.

The Wall Street Jorunal no baja los brazos y exige a Washington que actúe en reciprocidad con la Federación Rusa. Es decir, que aprese a los corresponsales rusos y les condene a tres meses de prisión como ha sucedio con Evan Gershkovich. Pero la Casa Blanca se resiste a tensar más la cuerda de lo que está en un contexto de guerra como la de Ucrania.

Por esta razón, el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, hizo de tripas corazón y ha llamado hoy directamente a su homólogo ruso, Serguéi Lavrov. Los máximos representantes de la diplomacia de ambas potencias hablaron por teléfono de la situación de Gershkovich aunque no se ha filtrado el tono ni los detalles de la conversación.

Únicamente Exteriores de la Federación Rusa, deslizó que la conversación se había producio y se jactó de que «la parte estadounidense inició la comunicación», tal como escribió en su cuenta de Telegram.