Alianza Atlántica
Alemania responde a las preocupaciones de Lituania y envía 4.000 soldados para reforzar su flanco oriental
Vilna denuncia que Bielorrusia se ha convertido «en un refugio para criminales de guerra» por la presencia de los mercenarios de Wagner en su territorio
los últimos acontecimientos en Rusia y por extensión en Bielorrusia han avivado los miedos de que el conflicto pueda extenderse más allá de las fronteras de la OTAN. Lituania ha pedido a los aliados que refuercen el flanco oriental, sobre todo, de cara a la cumbre de la Alianza Atlántica, el 11 y 12 de julio.
Alemania ha respondido diligente a esta petición y ha anunciado que enviará 4.000 soldados al país báltico. Hasta ahora, Berlín, así como otros países miembros de la OTAN, habían rechazado las peticiones de Lituania o Estonia de contar con brigadas estacionadas de manera permanente, pero los últimos acontecimientos en la Federación Rusa han trastocado los planes de Occidente.
La rebelión y posterior intento de golpe por parte del Grupo Wagner, liderado por Yevgueni Prigozhin, han sacudido nuevamente a Europa pero, sobre todo, a los países que hacen frontera con Rusia y Bielorrusia. Minsk se ofreció a acoger a Prigozhin y a los mercenarios sublevados, tras mediar en un acuerdo in extremis con el Kremlin.
«Observamos que Bielorrusia se ha convertido en un refugio para criminales de guerra», afirmó el presidente de Lituania, Gitanas Nauseda, para posteriormente subrayar que «el control de las fronteras de la OTAN y la defensa de su flanco oriental es lo más importante». Además, el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, tildó de «imprudente e irresponsable» el despliegue de armas nucleares en Bielorrusia.
Desde Vilna, Stoltenberg quiso lanzar un mensaje de calma, en medio de toda la confusión de los últimos días, y señaló que «no vemos ningún indicio de que Rusia esté preparando el uso de armas nucleares pero la OTAN permanece vigilante». En cuanto al motín del Grupo Wagner, explicó que se trata de «un asunto interno ruso y otra demostración de un gran error estratégico del presidente Putin como la anexión ilegal de Crimea y la guerra contra Ucrania».
489 días de guerra en Ucrania
Lituana no se fía si Prigozhin y los Wagner van a Minsk y pide a la OTAN reforzar su frontera
Los aliados han aceptado que la nueva línea defensiva se ha trasladado a los países bálticos. Así lo ha manifestado el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, que ha afirmado que Lituania era una nueva línea de frente con Rusia, como Alemania Occidental lo había sido con el Telón de Acero de la Unión Soviética en la Guerra Fría.
«Nos comprometemos explícitamente con nuestra responsabilidad y nuestra obligación, como Estado miembro de la OTAN y como mayor economía de Europa, de defender la protección del flanco oriental», ha asegurado Pistorius. Además de Lituania, Polonia también ha advertido de que se prepara para una nueva avalancha migratoria desde Bielorrusia de cara a la cumbre de Vilna.
Los Estados miembros de la organización militar se preparan para nuevas amenazas en sus fronteras. Unos temores alentados por la creciente inestabilidad en Rusia, la guerra en Ucrania y el nuevo papel mediador de Bielorrusia.