Fundado en 1910

El primer ministro de Israel, Benjamin NetanyahuAFP

Israel corre el riesgo de nuevas revueltas con la insistencia de Netanyahu con su reforma judicial

La Policía ha detenido de momento a 42 personas en todo el país por «violar el orden público» y los sindicatos amenazan con una huelga general

Histadrut, federación de sindicatos de Israel, advirtió al primer ministro, Benjamín Netanyahu, de lo que se le puede venir encima si no da marcha atrás con su reforma judicial. Para empezar, le amenazó con otra huelga general «si es necesario», en una jornada de protestas masivas en todo el país.

«Detenga el loco caos en la sociedad israelí lo antes posible. La pelota está en tu tejado. Cuando la situación llegue a un extremo y se hayan tomado todos los demás caminos, intervendremos y usaremos nuestro poder», afirmó hoy en rueda de prensa el jefe de Histadrut, Arnon Bar-David, en referencia a la posibilidad de una huelga general.

El pasado 29 de marzo, cuando la presión en las calles llegó a un punto álgido en contra de la reforma judicial –cuando estaba a punto de aprobarse una ley para cambiar la composición del comité de selección de jueces–- Histadrut convocó una huelga general, que obligó a Netanyahu a congelar la tramitación de esa legislación.

«Cerrar la economía no es un juego», advirtió Bar-David en la sede de Histadrut en Tel Aviv.

El Canal 12, la mayor cadena israelí de televisión, informó hoy de que altos cargos del sindicato se reunieron ayer para discutir la posibilidad de una huelga general, algo que aún no han hecho, lo que ha molestado al movimiento de protestas, que hoy se dirigieron a la sede de Histadrut para exigirles que actúen.

Corte de carreteras

Miles de manifestantes en contra de la reforma judicial tomaron desde temprano las principales carreteras y autopistas de Israel, cortando los accesos a las principales ciudades como Tel Aviv, Jerusalén y Haifa, en una nueva jornada de protestas masivas en todo el país.

Esta nueva «jordana de resistencia» se convoca hoy después de que la Knéset (Parlamento israelí) aprobara esta madrugada en primera lectura un proyecto de ley que elimina la doctrina de la razonabilidad, que permite al Supremo revisar y revocar decisiones gubernamentales en base a si éstas son razonables o no, uno de los pilares de la reforma judicial.

Los líderes de las protestas –un movimiento muy amplio que aglutina a múltiples sectores, desde el sector de la alta tecnología, los universitarios, hasta reservistas– llamaron a los ciudadanos a «reunirse y salvaguardar la democracia israelí», en un comunicado.

La Policía ha detenido de momento a 42 personas en todo el país por «violar el orden público», la mayoría de ellos en Tel Aviv donde desplegó a la policía montada; además de haber recurrido a los cañones de agua para dispersar a los alrededor de mil manifestantes que bloquearon desde primera hora de la mañana la autopista 1, que conecta Tel Aviv y Jerusalén.