La CIA lanza una campaña en redes para reclutar como espías a rusos descontentos con Putin
Alemania
Los dos espías alemanes que trabajaban para el Kremlin, acusados de alta traición
Las filtraciones de material clasificado de Carsten L. y Arthur E. a Moscú representó, según la Fiscalía, un «peligro de perjuicio especialmente grave para la seguridad exterior»
La Fiscalía Federal alemana acusó hoy de alta traición contra el Estado a dos ciudadanos alemanes, uno de ellos el espía detenido el pasado mes de diciembre bajo la sospecha de haber transmitido informaciones a Moscú. Entre 400.000 y 450.000 euros por cabeza habrían recibido por facilitar información clasificada.
El comunicado, difundido por Efe, precisa que hay suficientes indicios que refuerzan las sospechas contra Carsten L. y Arthur E. de «complicidad en dos casos de alta traición -particularmente grave- contra el Estado».
La información facilitada al Servicio Federal de Seguridad (FSB), heredero de la KGB, era confidencial y estaba catalogada como secreto de Estado según el artículo 93 del Código Penal.
En ambos casos, la revelación representó un «peligro de perjuicio especialmente grave para la seguridad exterior» de Alemania, subraya el comunicado.
El agente y los empresarios
Según el escrito de acusación, Carsten L., empleado del Servicio Federal de Inteligencia (BND), y Arthur E., empresario autónomo, se conocen desde mayo de 2021.
Arthur E., a su vez, está relacionado con un empresario en Rusia contra el que se instruye un caso separado y que tiene contactos con el FSB.
En una reunión a mediados de septiembre del año pasado, las citadas tres personas acordaron facilitar al FSB información sensible del BND.
La acusación señala que Carsten L. facilitó un total de nueve documentos del BND relativos a un proyecto de adquisición técnica de información, tanto en formato impreso como fotografiado de su pantalla.
Entre septiembre y octubre de 2022
Carsten L. entregó este material a Arthur E., quien a su vez se lo pasó al FSB en varias reuniones con agentes del servicio secreto entre septiembre y octubre del año pasado, organizadas por el mencionado empresario ruso que está siendo investigado por separado.
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Este último también reservó y financió los vuelos de Arthur E. a la capital rusa y de vuelta a Alemania.
Carsten L. aportó nuevamente información del BND a Arthur E. sobre una serie de cuestiones de particular interés para el FSB y que éste entregó a la inteligencia rusa en octubre pasado.
El FSB retribuyó a los acusados por sus servicios con 450.000 euros en el caso de Carsten L. y al menos 400.000 euros en el de Arthur E.
En base a las órdenes de detención dictadas por el juez de instrucción del Tribunal Supremo, Carsten L. fue detenido el pasado 21 de diciembre y Arthur E., el 22 de enero, y desde entonces se encuentran en prisión preventiva.