Ucrania anuncia que reclutará a refugiados ucranianos para reforzar su Ejército en la guerra contra Rusia
Ucrania está desesperada. La contraofensiva no avanza y Kiev se encuentra cada vez más solo, tanto en el plano militar como económico y diplomático. Las ayudas de los países, antaño aliados como Estados Unidos, están congeladas. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, teme acabar el año sin que se consoliden los paquetes financieros de Washington y Bruselas.
Ante este desalentador escenario, Ucrania ha tenido que recurrir a una medida excepcional. El ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umiérov, ha anunciado que los refugiados ucranianos en diferentes países europeo serán llamados a filas para reforzar el Ejército de su país.
Umiérov, en declaraciones al diario alemán Bild, afirmó que los hombres de entre 25 y 60 años recibirán una citación para presentarse en los centros de reclutamiento del Ejército ucraniano. En caso de no presentarse como voluntarios, se enfrentarían a sanciones no especificadas.
«Queremos justicia para todos, porque se trata de nuestro propio país. Les enviamos una notificación», explicó. Aunque, también, señaló que «todavía estamos discutiendo qué debe pasar si no vienen voluntariamente». Y añadió: «No es un castigo defender a tu país y servirlo. Es un honor».
Según detalló el ministro de Defensa ucraniano, a los reclutas se les informaría por adelantado de cómo se les entrenaría y equiparía, dónde y cuándo servirían y cuándo se les daría de baja. Asimismo, se les daría la oportunidad de elegir qué papel desempeñar en función de sus aptitudes.
Esta semana, Zelenski ya adelantó que los generales ucranianos pretendían movilizar hasta medio millón de nuevos soldados. Se cree que la mayoría de los soldados ucranianos en el frente son voluntarios, muchos de los cuales han estado luchando casi sin descanso desde el comienzo de la invasión rusa el año pasado.
Según la legislación ucraniana, sólo pueden movilizarse los hombres de entre 27 y 60 años, aunque los más jóvenes pueden presentarse voluntarios. Los reclutas de entre 18 y 20 años no pueden ser enviados al campo de batalla.
El ministro de Defensa ucraniano se pronunció también sobre los malos pronósticos de la contraofensiva y la falta de apoyo occidental. Pero, Umiérov reafirmó que no tiene «ninguna duda de que ganaremos». En este sentido, declaró que no cree que Estados Unidos vaya a dejar de prestar ayuda. «Entienden que las fuerzas del mal quieren cambiar el orden mundial».
Las constantes consultas con los socios occidentales de Ucrania «nos hacen confiar en que podemos cumplir nuestros planes», zanjó.