Alemania endurece su política migratoria para expulsar con rapidez a las personas que se les niegue el asilo
En 2023 Alemania recibió 329.120 nuevas peticiones de asilo y expulsó a un total de 16.430 personas a las que se les negó la protección internacional
Los diputados alemanes aprobaron este jueves una serie de medidas para endurecer la política migratoria del país, donde el número de solicitantes de asilo aumentó con fuerza el año pasado.
El alza de más de 50 % de las demandas de asilo en Alemania el año pasado, unida a la recepción de un millón de refugiados ucranianos pone a prueba las capacidades de las autoridades locales.
La medida responde en parte a las presiones realizadas por el partido AfD (Alternativa para Alemania), que experimenta un fuerte aumento en las encuestas.
«Vigilaremos que las personas que no tienen derecho a quedarse en nuestro país sean obligadas a irse más rápidamente», declaró el jueves la ministra del Interior, Nancy Faeser, respecto al plan que busca «expulsar de manera más rápida y eficaz».
Deportar a las personas a las que se les negó el derecho de asilo a sus países de origen liberará recursos para las personas que Alemania tiene que acoger, aseguró Faeser.
«Los que huyen de la guerra y el terrorismo pueden contar con nuestro apoyo», agregó Faeser, miembro del partido social-demócrata del canciller, Olaf Scholz, que gobierna en coalición con los verdes y los liberales.
Las medidas adoptadas dan más facultades a la policía para buscar a personas que tengan la orden de abandonar el país e identificar a los inmigrantes.
Además, la duración máxima de retención antes de la expulsión pasará de 10 a 28 días, para dar a las autoridades más tiempo para organizar las expulsiones.
Las asociaciones de defensa de derechos humanos criticaron esas nuevas disposiciones, y la Asociación de Abogados Alemanes afirmó que no hay una «proporcionalidad».
El gobierno considera que este conjunto de medidas permitirá 600 expulsiones adicionales cada año
Faeser destacó que la aplicación más dura de la política existente condujo el año pasado a un aumento de 27 % de las expulsiones, para alcanzar un total de 16.430.
Según las cifras oficiales en 2023 se registraron 329.120 nuevas peticiones de asilo.