Venezuela
Maduro acusa a la activista hispanovenezolana Rocío San Miguel y varios de sus familiares de «terrorismo»
El régimen chavista vincula a San Miguel en una trama conspirativa con el objetivo de «atentar en contra de la vida del jefe de Estado, Nicolás Maduro»
La activista hispanovenezolana Rocío San Miguel, presidenta de la ONG Control Ciudadano, detenida el pasado viernes, fue presentada la noche del lunes ante el Tribunal segundo contra Terrorismo, junto a varios de sus familiares, también privados de libertad en las últimas horas, informó el fiscal general del régimen chavista, Tarek William Saab.
En un mensaje en su cuenta de X, el fiscal informó que se encuentra en desarrollo la audiencia de presentación de San Miguel, de Alejandro José González Canales, expareja de la activista, y otros cuatro ciudadanos cuyos nombres no mencionó, pero son, presumiblemente, los familiares que más temprano la defensa de la activista reportó como «desaparecidos».
Las cuatro personas señaladas por uno de los abogados de la defensora de derechos humanos son Miranda Díaz San Miguel, hija de la activista; Miguel Ángel y Alberto San Miguel, hermanos; y Víctor Díaz Paruta, padre de Miranda.
Saab aseguró que el Ministerio Público (MP/Fiscalía) solicitará «medida de privación judicial preventiva de libertad en contra de la ciudadana Rocío del Carmen San Miguel Sosa por la presunta comisión de los delitos de traición a la patria, conspiración, terrorismo y asociación, entre otros».
Además, indicó que pedirá también la privación de libertad «preventiva» para González Canales por la «presunta» comisión de los delitos (de) revelación de secretos políticos y militares concernientes a la seguridad de la nación, obstrucción a la administración de justicia y asociación.
Asimismo, solicitará medidas cautelares, «consistentes en presentaciones periódicas ante el tribunal de la causa», para las otras cuatro personas.
El fiscal aseguró que los seis detenidos aparecen «presuntamente involucrados» en la trama conspirativa denominada 'brazalete blanco', cuyo objetivo era «atentar en contra de la vida del jefe de Estado, Nicolás Maduro, y otros altos funcionarios», y con la cual ya había vinculado a San Miguel cuando confirmó su detención este domingo.
Remarcó que las actuaciones están «dentro de los lapsos legales» y «en estricto apego al respeto de los derechos humanos», pese a que la defensa de la activista denunció la «desaparición forzada» de San Miguel, que estuvo en paradero desconocido desde el viernes, cuando fue detenida en el aeropuerto internacional de Maiquetía, que sirve a Caracas.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó este lunes la «desaparición forzada» de San Miguel y recordó que la activista es beneficiaria de medidas cautelares del organismo.