El plan de Sunak de mandar inmigrantes a Ruanda enfada a Irlanda y pone en riesgo el acuerdo del Brexit
Dublín denuncia que solicitantes de asilo en Reino Unido cruzan la inexistente frontera con Irlanda para refugiarse en la UE y evitar la deportación a Ruanda
El proyecto del gobierno británico de internar a solicitantes de asilo en campos de inmigrantes en Ruanda ya está teniendo efectos disuasorios respecto a la inmigración irregular. Sin embargo, ha generado también un efecto inesperado que podría poner en peligro el acuerdo del Brexit con la Unión Europea.
Ante la posibilidad de ser detenidos y trasladados a Ruanda, muchos solicitantes e inmigrantes en territorio de Irlanda del Norte (territorio británico) están cruzando la invisible frontera con la República de Irlanda para acceder a la Unión Europea.
En virtud del acuerdo del Brexit entre Reino Unido y la Unión Europea, no existe ningún tipo de frontera física entre Irlanda e Irlanda del Norte, para así salvaguardar los Acuerdos de Viernes Santo que pusieron fin a décadas de violencia sectaria en el Ulster.
Según datos del gobierno irlandés, el 80 % de los solicitantes de asilo que llegan a territorio irlandés lo hacen cruzando la frontera invisible con Irlanda del Norte.
Ante la exigencia de Dublín de que Reino Unido acepte a los inmigrantes interceptados en territorio irlandés procedentes de territorio británico, el gobierno del conservador Rishi Sunak afirmó que no aceptará ningún regreso procedente de Irlanda y que la cuestión se deberá negociar, en cualquier caso, con las autoridades europeas y no irlandesas.
Además, vinculó cualquier tipo de acuerdo en ese sentido a que Francia también acepte hacerse cargo de los inmigrantes que llegan en embarcaciones a las costas del sur de Inglaterra cruzando el canal de la Mancha procedentes de territorio francés.
Así lo afirmó con contundencia el ministro británico para Irlanda del Norte, Chris Heaton-Harris, tras reunirse con el viceprimer ministro irlandés Micheál Martin.
Por su parte, Sunak afirmó que «el Gobierno del Reino Unido decide a quién acepta y a quién no, y no vamos a empezar a aceptar retornos de la Unión Europea si la Unión Europea no acepta retornos del Reino Unido a Francia».
Además, aseguró que al gobierno británico no le interesa llegar a ningún tipo de acuerdo sobre esta cuestión con Irlanda.
El problema causará inevitablemente, un choque institucional entre Irlanda (y con ella la Unión Europea) y Reino Unido, toda vez que Dublín ultima en su parlamento una ley para devolver inmigrantes a suelo británico.