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Andrés Manuel López Obrador y la presidenta electa, Claudia SheinbaumEFE

Presidencia de México

De Díaz-Canel a Maduro, los otros invitados tras Putin que Sheinbaum podría recibir en México

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha rechazado la eventual detención de Putin en caso de asistir a su traspaso de poder a Sheinbaum

La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, tiene planeado su toma de posesión en el cargo el próximo 1 de octubre. La polémica está servida ya que, a través de la Embajada de Rusia en México, ha invitado al presidente de Rusia, Vladímir Putin.

Debido a esta iniciativa enviada al invasor de Ucrania las reacciones no se han hecho esperar. Su vecino del norte, Estados Unidos, ha explicado que la presencia de un criminal de guerra ruso en un acto de tal trascendencia empañaría «un momento histórico» para el país hispanoamericano.

Para darle carácter institucional esta cita se ha enmarcado «dentro de los 100 años del establecimiento de relaciones diplomáticas entre México y la URSS» lo que para el todavía Gobierno de López Obrador «constituye una fecha histórica significativa». Además, el embajador de Rusia en México, Nikolay Sofinskiy, se escuda en que «en 1924, México se convirtió en el primer país, no solo de Hispanoamérica, sino de todo el hemisferio occidental, en reconocer a la Unión Soviética».

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha solicitado el arresto del autócrata ruso. Mientras, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha rechazado la eventual detención de Putin en caso de asistir a su traspaso de poder a Sheinbaum pese a la orden de arresto recientemente emitida por la Corte Penal Internacional. «Hemos propuesto que haya intermediación (en referencia a las relaciones entre Rusia y Ucrania) », sentenció en su discurso mañanero.

Lo cierto es que AMLO tardó meses en declararse en contra de la ocupación de Ucrania por parte de Rusia. Y no lo hizo de palabra, si no a través de votaciones en organismos internacionales.

Ni Putin se va arriesgar a asistir a México, ante una posible detención internacional. Ni AMLO (por lo menos lo que le queda de mandato) se trasladará a suelo ruso para generar una polémica innecesaria con EE.UU., su socio económico fundamental.

Tanto Sheinbaum como López Obrador se han declarado en alguna ocasión comunistas. Siempre a conveniencia y muchos meses antes de sus respectivas campañas electorales.

No obstante, lo que no pueden obviar son los acercamientos de López Obrador con Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro, los dictadores de Cuba y Venezuela, respectivamente.

El mandatario mexicano visitó a Díaz-Canel en Cuba, aprovechando una gira por los países de Centroamérica. Fue recibido con honores en La Habana, donde se llegó a reunir con Raúl Castro (93 años de edad). Una cita, que celebraron con júbilo, tal y como trasladó el presidente mexicano en sus redes sociales, pese a la senectud de su acompañante. Dejando patente su sintonía la familia de Fidel Castro.

Canel, por su parte, asistió a un Grito de México en el que se celebra la independencia de nuestro país, para el que tuvieron fuertes palabras tildándonos de conquistadores abusadores.

Además, Sheinbaum, la que será la presidenta oficial a partir del 1 de diciembre, recibió a Díaz-Canel en el Palacio Nacional, junto a AMLO, para investirle como Huésped Distinguido de la Ciudad de México.

Maduro, es otro mandatario de la clase de Putin, que no se va a arriesgar a un encuentro fortuito con la cancillería mexicana, para posteriormente ser detenido o enemistar a la nación hermana con Estados Unidos. Pero, que ya estuvo presente en México y que acaba de agradecer a AMLO por «respetar» a Venezuela.

Todo puede suceder entre los amigos del 'Grupo de Puebla'. Lo que es seguro es que no acudirán ni Daniel Noboa, presidente de Ecuador, y ni Dina Boluarte, la dirigente de Perú, ya que la próxima máxima autoridad de México «no está de acuerdo con sus políticas». Sin duda, ni gobiernan para todos, ni lo pretenden, ya que no incluyen a contrarios a su ideología.