Guerra Ucrania – Rusia
La ofensiva de Zelenski en Kursk indigna a Putin y le obliga a aumentar su población militar
El Ejército ucraniano podría capturar soldados rusos para usarlos como palanca para el regreso de 8.000 priosioneros retenidos por Rusia
La noticia de hoy sobre la guerra entre Rusia y Ucrania la protagonizó el anuncio del Ministerio de Defensa ruso en el que afirmaba que hasta «once drones fueron destruidos» sobre el territorio de Moscú y su región durante la noche, lo que representa «uno de los intentos de ataque más importantes jamás realizados» contra la ciudad con drones explosivos, según declaró el alcalde, Serguéi Sobianin. El que sería el mayor ataque sobre la capital rusa llevado a cabo por Ucrania no ha sido ni confirmado ni desmentido por su presidente Volodímir Zelenski.
El Ejército ucraniano mantiene uno de sus focos centrado en la incursión de la región rusa de Kursk en la que ha confirmado que mantiene 98 asentamientos. Esta nueva invasión lleva ganados 1.260 km2 en la región con el objetivo de crear una «zona tapón» en suelo ruso para proteger la región ucraniana de Sumi.
Ucrania ha logrado avances significativos en Kursk. Las fuerzas ucranianas, confirmaron hace dos días, habían destruido un tercer y último puente sobre el río Seym, lo que ha cortado el paso a la parte sur de Kursk, donde las tropas rusas restantes se enfrentan ahora a un cerco originado por las fuerzas de Kiev. Debido a este movimiento, el Ejército de Putin se encuentra atrapado entre el río, la frontera ucraniana y la zona recién tomada.
Putin se queda sin efectivos militares
El Gobierno de Putin, ante la falta de recursos, se ve obligado a trasladar a sus tropas de Ucrania a Kursk por la ofensiva de Zelenski. Ante la falta de combatientes, Rusia ha convocado a «alrededor de 190.000 ciudadanos como soldados con un ritmo medio diario de unas mil personas». Por lo que la población militar ascendería a 760.000 combatientes, según las informaciones rusas, lo que supondría unir el total de residentes de Sevilla y Pontevedra.
La toma de territorio ruso también puede dar a los ucranianos una mejor posición en cualquier negociación ante Moscú, que anteriormente estaba interesado en un acuerdo, pero que ha descartado las conversaciones después de la operación de Kursk.
Esta operación ofrece a Zelenski la posibilidad de capturar prisioneros de guerra rusos para usarlos como palanca para el regreso de 8.000 soldados ucranianos retenidos por Rusia. «Estamos logrando nuestros objetivos. Esta mañana tenemos otra reposición del fondo de intercambio para nuestro país», comentó.
Se trata de un éxito inopinable del mandatario ucraniano, que no debe de dejar de lado el Donbás, en el este de Ucrania, donde las fuerzas rusas avanzan en medio de intensos combates por la ciudad de Pokrovsk.