Corea del Sur y Reino Unido advierten del alto precio que Rusia pagará a Kim Jong-un por su ayuda militar
Estados Unidos ha consultado a los aliados sobre el envío de tropas norcoreanas a la guerra de Ucrania
La comunidad internacional no reaccionó cuando el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, avisó hace más de una semana de la creciente implicación de Corea del Norte en el esfuerzo bélico de Rusia contra su país. No solo con el envío de armas sino también con tropas de refuerzo, y pidió a los aliados de Ucrania actuar con premura.
Este martes, Estados Unidos ha asegurado que sería un «acontecimiento peligroso y altamente preocupante» si Corea del Norte enviara tropas para ayudar a Rusia en Ucrania». Además, Corea del Sur y Gran Bretaña advirtieron del alto precio que Moscú probablemente tendría que pagar a Pyongyang.
«Estamos consultando con nuestros aliados y socios sobre las implicaciones de una medida tan drástica», comunicó el embajador adjunto de Estados Unidos ante la ONU, Robert Wood, al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, integrado por 15 miembros.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenski, continua acusando a Pyongyang de estar preparando el envío de 10.000 soldados a Rusia.
El embajador de Ucrania ante la ONU, Sergiy Kyslytsya, declaró el lunes al Consejo de Seguridad: «Se espera que estas tropas estén listas para la guerra contra Ucrania el 1 de noviembre».
La agencia de espionaje de Corea del Sur informó la semana pasada que Corea del Norte había enviado 1.500 tropas de fuerzas especiales al Lejano Oriente de Rusia para entrenamiento y aclimatación en bases militares. Informando que probablemente serían desplegados para combatir en Ucrania.
«Si es cierto, esto marca un desarrollo peligroso y altamente preocupante y una evidente profundización de la relación militar entre Corea del Norte y Rusia», dijo Wood sobre los informes, utilizando el nombre formal de Corea del Norte: la República Popular Democrática de Corea.
El embajador de Rusia ante la ONU, Vassily Nebenzia, acusó a los países occidentales de «distraerse con la difusión de alarmismos con fantasmas iraníes, chinos y coreanos, cada uno de los cuales es más absurdo que el anterior».
Por su parte, la embajadora de Gran Bretaña ante la ONU, Barbara Woodward, ha confesado que era «muy probable» que Corea del Norte estuviera enviando tropas.
«Parece que cuanto más difícil le resulta (a Putin) reclutar rusos para que sean carne de cañón, más dispuesto está a confiar en Corea del Norte en su guerra ilegal», afirmó. «Podemos estar seguros de que los dirigentes de Corea del Norte pedirán un alto precio a Rusia a cambio».
También, el embajador de Corea del Sur ante la ONU, Joonkook Hwang, advirtió al Consejo sobre las implicaciones de tal medida, confirma Reuters.
«Corea del Norte espera una recompensa generosa de Moscú a cambio de su contribución de tropas. Podría ser ayuda militar o financiera. O tal vez tecnología relacionada con armas nucleares», afirmó.
Corea del Norte ha estado bajo sanciones de la ONU desde 2006 por sus programas nucleares y de misiles balísticos. Esas medidas se han fortalecido con el paso de los años, con el apoyo de Rusia.