Taiwán considerará un «acto de guerra» que China bloquee el estrecho, donde ya ha mandado un portaaviones
Según un informe del Center for Strategic and International Studies, una quinta parte del comercio mundial —2,45 billones de dólares— circula por el estrecho
Nuevos movimientos de China cerca de la frontera de Taiwán. El Gobierno isleño ha detectado la presencia de un portaviones navegando hacia el estrecho que separa los territorios.
El Ministerio de Defensa, en un comunicado, detallaba que se trataba de una flota de la Marina China «liderada por los portaviones Liaoning navegaba por aguas cerca de Dongsha y continuaba hacia el norte hacia el estrecho de Taiwán».
Ayer, el gigante asiático realizaba unas maniobras con fuego real a 105 kilómetros de la frontera y la semana pasada otras maniobras con aviones y buques, entre las que se encontraba el citado Liaoning, que fue tildado de «firme aviso contra los separatistas».
«Un acto de guerra»
Si China realiza un bloqueo a Taiwán, alertaba el ministro taiwanés de Defensa, Wllington Koo, será interpretado como un «acto de guerra». Para ello se apoya en la definición de Naciones Unidas, ya que el Ejército Chino debería impedir la entrada de sus barcos y aviones a Taiwán, territorio con un Gobierno independiente desde 1949 y que Pekín considera una provincia rebelde.
«Hay una diferencia significativa entre maniobras militares y un bloqueo real, y el impacto para la comunidad internacional sería completamente diferente», avisaba Koo.
«Si el Partido Comunista chino lleva a cabo un bloqueo tal y como está definido por el derecho internacional, eso impactaría gravemente en el comercio y la economía global, y la comunidad internacional no podría ignorar una acción semejante», proseguía.
Cerca de una quinta parte del comercio mundial circula por el Estrecho. Así lo evidenciaba un informe de 2022 del Center for Strategic and International Studies, lo que representan 2,45 billones de dólares.
El organismo encargado de las relaciones con China explica que el portaviones «está generando constantemente capacidades de combate y realizando entrenamientos de larga duración más allá de la primera cadena de islas», tratando de «construir una capacidad de defensa entre la primera y segunda cadena de islas». Estas constituyen un concepto estratégico entre Kuriles y Singapur, pasando por Japón, Taiwán y Filipinas. El segundo llega desde el archipiélago japonés de Ogasawara hasta Palaos.