Elecciones Estados Unidos 2024
Washington suspende a Biden pero, salvo sorpresa, habrá una victoria demócrata
Ni siquiera Ronald Reagan en 1984, a pesar de su victoria aplastante sobre Walter Mondale, fue capaz de ganar los tres votos electorales que se reparten en la capital de los Estados Unidos
«¿Ya has votado? ¡Impresionante! ¡Esa es la banda sonora que está sonando en tus auriculares! ¡Que tengas un buen día!», grita Chris a un votante que acaba de salir del colegio de primaria Mary Reed, en el Distrito 1 de Washington D.C. Chris es voluntario de la Junta Electoral en el Distrito de Columbia y anima a todos los que llegan al centro electoral para votar, porque «hoy es un gran día, no me importa a quién voten, siempre y cuando todos ejerzan su derecho constitucional, porque para eso estamos aquí y por eso estoy tan contento».
Este 5 de noviembre es la fecha clave de la carrera presidencial desde que, a mediados de enero, arrancó el proceso con el caucus republicano de Iowa. Los 51 estados han empezado ya a votar por Kamala Harris o por Donald Trump desde primera hora de la mañana. Aquí en Washington D.C., feudo demócrata donde los haya, los centros han abierto a las 7 de la mañana y permanecerán abiertos hasta las 20 hora local.
Cuando preguntas a los electores a la salida de los centros sobre la importancia de votar en las presidenciales, arrancan con un discurso de defensa de un cambio y, aunque no quieren mojarse, sí terminan mostrando su preferencia por las políticas demócratas. Phil, un hombre blanco de mediana edad, dice abiertamente que ha votado por Kamala Harris. «Washington D.C. es muy azul, sí», dice bromeando. «Creo que Kamala hará un buen trabajo, es una profesional, la otra opción es demasiado conflictiva», comenta refiriéndose a Donald Trump.
En la capital de los Estados Unidos, todo sea dicho, no se espera una sorpresa, que pasaría por una victoria republicana. Aquí se vota demócrata desde tiempos inmemoriales. Ni siquiera Ronald Reagan, que arrasó en las presidenciales de 1984 en 48 estados frente a Walter Mondale, consiguió hacerse con los tres votos electorales que se reparten. Tampoco le hicieron falta, obtuvo 525 de los 538.
A pesar de ser el gran feudo demócrata, aquí en el Distrito de Columbia no aprueban al actual presidente. Si en algo ha acertado Joe Biden ha sido en dar un paso al lado. «No sé si habría votado por él, habría sido una decisión difícil, así que me alegro de que se haya retirado», aseguraba Phil, votante de Kamala Harris, cuando hablaba con El Debate. Sarah, por ejemplo, no se cree que los republicanos sean minoritarios, «aquí hay muchas personas que no están siempre de acuerdo con todas las ideas y todo la agenda de los demócratas».
Zahira Battle es una joven afroamericana que está votando por primera vez. Confiesa que al entrar al colegio estaba nerviosa, porque lo de votar «hace que te sientas un poco más estadounidense» y dice que es importante por Kamala Harris, «porque es una mujer negra y supone una transición muy grande, especialmente para los Estados Unidos». «Soy generación Z», dice. Su madre, que sonríe mientras Zahira habla, interviene para apuntar que «no se trata de si eres republicano, no se trata de si eres demócrata, como si fuera lo correcto o incorrecto», para ella el problema es que «estamos ante personas que quieren llevarnos al pasado. No vamos a volver atrás».
¿Qué se vota en Washington D.C.?
En Washington D.C. más allá de los tres votos electorales que aportan al resultado de las elecciones presidenciales, es casi más importante lo que se vota a nivel local; ya que los residentes, aunque no sean ciudadanos, también tienen voz y voto en esos asuntos. En los 72 colegios repartidos entre los ocho distritos que componen la capital, se elegirán a los miembros del Concejo del Distrito de Columbia, se votará el comisionado asesor de vecindario de cada distrito de la capital y al miembro de la Junta Estatal de Educación.
Sin olvidar la Iniciativa 83, un referéndum con el que sus impulsores pretenden abrir las primarias a todos los candidatos, aunque no estén registrados en un partido, y así aumentar las posibilidades de elegibilidad de los independientes. En todos los colegios te encuentras a uno de sus voluntarios, como Neck. «Es importante que se permita votar a los independientes. Haría que las elecciones fueran más competitivas. Ahora, muchas personas del concejo municipal son elegidas con menos del 50 % de los apoyos. Esto permitiría a las personas votar por candidatos adicionales y obligaría a un candidato a obtener más del 50% de los votos».
Gran despliegue para la noche electoral
Mientras la campaña de Donald Trump se ha decantado por Palm Beach, en Florida, para seguir la noche electoral, los demócratas han hecho un despliegue de medios impresionante en la Universidad de Howard, donde estudió su carrera Kamala Harris. Casi la mitad del recinto está vallada para la celebración, dos manzanas al este de Georgia Avenue y otras cuatro de norte a sur.
El recuento arrancará al cierre de los colegios, que varía en función de cada estado. Si en Washington D.C. el cierre es a las 20 horas, en Nueva York se prolonga el horario hasta las 21 horas. Sin embargo, en otros estados como Georgia, el voto se corta una hora antes, a las 19 horas. Los ojos están puestos en esos siete estados bisagra. Nevada, Michigan, Arizona, Pensilvania, Carolina del Norte, Wisconsin y Georgia.
El resultado no está nada claro, aunque lo que sí podrán celebrar los demócratas en ese gigantesco escenario que han montado en la Universidad de Harris, a no ser que todo les salga mal, es la victoria en la capital.