Fundado en 1910

El presidente de EE.UU. Donald Trump en un acto en Las Vegas, NevadaMandel Ngan / AFP

Estados Unidos

Trump desmantela la política de género de Biden, restaura la meritocracia y recupera la educación en valores

Tanto el discurso inaugural como las primeras órdenes ejecutivas firmadas por el presidente apuntan a «recuperar los valores estadounidenses»

«La gente quiere que regresemos a la esencia de lo que es Estados Unidos que fue fundado por personas que estaban muy unidas a al corazón de Dios» fue la respuesta de un partidario del presidente Donald Trump al ser entrevistado por El Debate en Washington D.C. en vísperas de la toma de posesión del líder republicano.

El primer día de su nuevo mandato, el presidente Trump firmó una serie de medidas tanto en lo político y económico, pero también en lo social. En este último aspecto, aunque las medidas no son numerosas, son de profundo calado en la sociedad estadounidense.

El hecho mismo que un presidente creyente y coherentemente con una postura contra el aborto y a la ideología de género es un cambio radical en la cúpula del poder que irradia todos los sectores y animas a sus seguidores a confiar que a nivel social Estados Unidos retornará a sus valores fundacionales.

Precisamente, tanto en el discurso inaugural como en una de las primeras órdenes ejecutivas firmadas por Trump, el presidente apuntó a «recuperar los valores estadounidenses» refrendó la Casa Blanca, al referir que «el presidente establecerá la realidad biológica de lo masculino y lo femenino y protegerá a las mujeres de la ideología de género radical».

En la orden ejecutiva referida, Trump anuló una que Joe Biden firmó también en su primer día, el 20 de enero de 2021, denominada Promoción de la equidad racial y el apoyo a las comunidades desfavorecidas a través del gobierno federal, misma que de acuerdo con la Fundación Heritage «se convirtió en una obsesión de cuatro años con las preferencias raciales y sexuales».

«Durante las siguientes 48 horas, Trump se dedicó a desmantelar sistemáticamente las prácticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) en toda la vasta burocracia federal, los contratistas federales y los receptores de subvenciones federales» explicó en un análisis Mike González, miembro sénior de la Heritage.

González se refiere a otras dos órdenes ejecutivas firmadas entre el propio lunes cuando asumió el cargo y el martes pasado. La segunda textualmente señalaba «poner fin a los programas gubernamentales de DEI radicales y derrochadores» y la tercera señalaba «poner fin a la discriminación ilegal y restablecer las oportunidades basadas en el mérito», derogando así años de ‘discriminación positiva’ basado en preferencias raciales.

Esta última orden ejecutiva fue fulminante al ordenar girar una notificación en la que se le informaba a todos los funcionarios de áreas de diversidad que quedaban en «licencia administrativa remunerada con efecto inmediato», es decir, en proceso de cancelación de sus contratos ante el inminente cierre de sus dependencias.

El ejército estadounidense también se librará de la ideología de género y de las políticas de diversidad. El mandatario aseguró que «los soldados estadounidenses ya no se someterán a experimentos sociales sin sentido» y agregó: «Me aseguraré de que se centren en su principal función: acabar con los enemigos de Estados Unidos».

La educación en valores

«Yo no quiero que mi hijo vaya a una escuela donde le digan que está bien con cualquier cosa que quiera ser [en cuanto a sexo y género]. Yo soy el padre y yo quiero decirle que es lo correcto y lo que no lo es» continuó el seguidor de Trump, que llegó a la inauguración presidencial con su familia y agregó con rotundidad: «Él ese es el tipo de presidente que va a apoyar a los padres de familia».

Precisamente, el presidente Trump también promete dar la batalla en el campo de la educación. En un mitin previo a las elecciones presidenciales de 2024 ya adelantó su propósito de revertir la agenda woke en la educación pública estadounidense: «Sacar la teoría crítica de la raza de nuestras escuelas no es solo una cuestión de valores, también es una cuestión de supervivencia nacional.»

Trump ha dejado claros sus planes para su segundo mandato en materia de educación y ha prometido recortar la financiación federal a las escuelas que participen en debates sobre temas como la raza, el género y la sexualidad. Si bien es cierto la educación es de competencia de los estados y no del Gobierno Federal, buscará remover de las aulas de clases a cualquier educador que enseñe estos temas, creando «un nuevo organismo de acreditación para certificar a los profesores que adoptan valores patrióticos».

El presidente Trump describió su plan para controlar la acreditación universitaria como su «arma secreta» contra la teoría crítica de la raza promovida por la administración Biden.

Finalmente, la Casa Blanca agregó que con el propósito de recuperar los valores nacionales «los monumentos estadounidenses recibirán nombres que honren adecuadamente la historia de nuestra nación».