Aunque no es sencillo, cruzarlos marcha atrás es más seguro

Aunque no es sencillo, cruzarlos marcha atrás es más seguro

Práctico

La razón por la que deberíamos pasar los charcos marcha atrás

En épocas de lluvias cualquier precaución es poca para evitar tener problemas con nuestro automóvil en los charcos y balsas de agua

Durante estos días las lluvias han sido generalizadas en toda España y el panorama indica que podrían continuar las próximas semanas. Más allá de cambios climáticos, la realidad es que el otoño suele ser una época habitual para las tormentas.

El problema es que cuando las lluvias son muy copiosas pero lleva tiempo sin caer agua, tal y como ha ocurrido este verano, la suciedad suele taponar los aliviaderos de las carreteras y los subterráneos, por lo que no es extraño que se formen grandes charcos y balsas de agua que dificultan el paso de los coches.

Charcos y balsas de agua

Estamos hartos de ver en redes sociales vídeos de coches que se quedan atascados en estas grandes balsas de agua por un motivo muy sencillo: el agua entra en la admisión del motor y se llena de agua, una avería muy importante que además hace que el coche se quede parado en mitad del charco.

Coches parados en mitad de una balsa de agua, una imagen habitual

Coches parados en mitad de una balsa de agua, una imagen habitual

Cuando vamos a cruzar una acumulación de agua es importante no dejar de acelerar durante toda la travesía, además de comprobar la profundidad del charco, pues si cubre el motor vamos a tener problemas.

Atención a la profundidad

Conviene no ir detrás de otro coche, pues si el otro vehículo se queda tirado, nosotros también justo detrás. Por último, el mejor de los consejos es no intentar cruzar la balsa de agua sino dejar el coche aparcado en un lugar seguro y tener un poco de paciencia.

Aunque no es sencilla, esta maniobra protege el motor

Cruzar marcha atrás, es difícil pero más seguro para la mecánica

Existe otra técnica que consiste en pasar el charco marcha atrás. De esta manera, el motor del coche permanece protegido y no le entrará agua.

De hecho, la propia forma de la ola que crea el coche delante va generando un efecto muy curioso que protege la parte trasera del vehículo. Por último, conviene recordar que no debemos dejar de acelerar, pues si entra agua por el tubo de escape además de pararse el motor tendremos una avería muy importante.

comentarios
tracking