Las fábricas que prometen los chinos tienen poco que ver con las tradicionales europeas
Industria
Europa no se traga el anzuelo de las marcas chinas y les exigirá que monten fábricas de verdad
Pese a las promesas de los fabricantes chinos la realidad es que a día de hoy no se ha fabricado un solo coche chino en territorio español
En el sector del automóvil europeo existe cierta desconfianza hacia la llegada de la industria china automotriz, más allá del precio de sus coches, que puede dinamitar el sector europeo, no hay firma china que no haya coqueteado con la puesta en funcionamiento de una factoría en Europa.
En el caso concreto de España ha habido negociaciones con diferentes grupos para reindustrializar o levantar plantas en Linares, Asturias, Aragón o Galicia, aunque la realidad es que la única confirmada es la que va a levantar Chery en las antiguas instalaciones de Nissan en la Zona Franca, Barcelona.
Cero coches
En este caso Chery tenía previsto ensamblar modelos de las marcas Omoda y Jaecoo, aunque finalmente la compañía habla ya abiertamente de un retraso de un año, pues los coches deberían estar saliendo ya de la planta con una cadencia de 20.000 unidades anuales.
Los Omoda 5 deberían montarse en Barcelona
En paralelo parece que la firma sigue para delante con el ensamblaje y comercialización de tres vehículos de la marca Ebro (Actualmente propiedad de EVMotors )que sí deberían fabricarse en breve en estas instalaciones, de hecho la intención es que las primeras unidades salgan en noviembre, para lo cual los planes iniciales son de 100 operarios que llegarán hasta 300 a lo largo del año que viene. Unas cifras muy bajas si fuera una factoría convencional, donde hablamos de miles de empleados.
Simple ensamblaje
En este caso los vehículos de la marca Ebro van a ser simplemente ensamblados en la planta, pues se producirán bajo el procedimiento SKD (semi knocked down), se trata de una especie de kits que simplemente hay que montarlos, sin soldadura ni pintura.
Ebro S700, un modelo de unos 27.000 euros
Una técnica con la que las marcas chinas podrían estar tratando de evadir los aranceles a sus coches, que rondan el 40 % en algunos casos.
Conviene decir que fuentes cercanas a la industria china confirman que el pasado mes de julio el Gobierno se reunió con los principales fabricantes de su país con doble motivo; por un lado prohibirles que pongan factorías en India y Turquía sin autorización y pedirles que mantengan sus ventaja competitiva (know how) en materia de coches eléctricos bajo secreto, lo que quiere decir que sólo podrán ensamblar los coches en formato kit.
Europa no traga
Hace sólo unas semanas que el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, declaró que sólo se librarán de los aranceles las marcas chinas que compartan la cadena de valor añadido con Europa, lo que quiere decir que el Viejo Continente va a estar muy atento a lo que está sucediendo.
Las marcas chinas también hablan de reindustrializar Santana en Linares
Detrás del retraso de la producción del Omoda 5 podría estar el hecho de que Chery se está replanteando su inversión en la antigua planta Nissan de la Zona Franca, pues podrían verse obligados a fabricar coches a la manera tradicional europea y no simplemente mandarlos a medio ensamblar.
Tanto Saic, propietaria de MG, como Chery podrían estar esperando a tener clara la posición europea antes de confirmar la ubicación de alguna factoría y sus condiciones de funcionamiento.
