¿Dónde están los sindicatos?
Vamos camino de un año con la luz más cara de la historia, con los combustibles por las nubes y con la inflación lastrando a los más débiles
Me lo preguntan todos los días y también me lo pregunto yo: ¿en qué recóndito lugar de la geografía española se han escondido los sindicatos? Mientras los españoles nos vamos empobreciendo, UGT y CC. OO. se han quedado con el egoísmo de los nacionalistas y con las batallas identitarias, pero de los problemas reales de los trabajadores no tienen nada que decir. Ya sabemos, porque lo dijo públicamente, en sede parlamentaria, Yolanda Díaz, que cuando gobierne la derecha, harán arder las calles; pero mientras, se envolverán en sus fulares color docilidad y dejarán que la clase media se empobrezca y la baja se nutra de muchos españoles que ya no llegan a fin de mes. Vamos camino de un año con la luz más cara de la historia, con los combustibles por las nubes y con la inflación lastrando a los más débiles. No esperen nada de Pepe Fernández. Su sectarismo se lo impide. Cuando gobernaba Rajoy, su sindicato batió el récord histórico de convocar dos huelgas generales en el plazo de seis meses. Fracasaron ambas convocatorias. Mi pregunta y mi duda es si los camioneros autónomos no son también clase trabajadora. Si los agricultores, ganaderos y pescadores no merecen la atención de quienes presumen de estar al lado de los débiles. Va a resultar que no, que en realidad, los sindicatos de clase están para apoyar a la oligarquía social-comunista, que tan bien vive, mientras sufren los demás. En España, como en medio mundo.