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08 de septiembre de 2024

Cosas que pasanAlfonso Ussía

Cárcel y fútbol

Hasta el día 19 de julio, no se producirán más detenciones arbitrarias y estalinistas. Los policías del grupo especial de Marlasca están entrenando y ensayando estrategias para impedir que Begoña Gómez sea fotografiada en su segunda comparecencia ante el juez

Actualizada 01:30

He leído – lo hago siempre–, a Salvador Sostres. Se ofrece a ser detenido por el grupo político de la Policía de Marlasca. Al final de su texto, resume sus delitos. Es un hombre, católico, blanco y sentimental. Negacionista de la farsa del cambio climático. Padre y esposo. Ayuso y Florentino Pérez en su corazón a pesar de su lógico barcelonismo. Como poco, reúne en su persona igual o mayor delincuencia que el extraordinario Nacho Cano. Mi caso es más grave, pero vivo en un precioso pueblo de La Montaña, y ya no me muevo por mi Madrid y su Barcelona. No obstante, me gustaría tranquilizar su condición de hombre libre. Hasta el día 19 de julio, no se producirán más detenciones arbitrarias y estalinistas. Los policías del grupo especial de Marlasca están entrenando y ensayando estrategias para impedir que Begoña Gómez sea fotografiada en su segunda comparecencia ante el juez.

A partir del 20 de julio, le recomiendo a Sostres que adopte las medidas necesarias –y a tantos otros–, para evitar su detención cubana. Se cruzará en la frontera con sus paisanos delincuentes, golpistas, cobardes y terroristas amparados por Conde Pumpido y sus secuaces. Nacho Cano ya lo ha advertido. "Si un día mi cuerpo aparece sin vida en una cuneta, sabréis quiénes lo han hecho–. No me refiero a la Policía, sino al grupete político de la Policía que rodea a Marlasca. Hasta el 20 de julio, tranquilidad. Con anterioridad a Nacho Cano y a Sostres, el que lo puede pasar regular es el juez si adopta medidas cautelares con la imputada. Y lo del fútbol.

Irene Montero sería el gran fichaje de TVE para intervenir en la retransmisión de la final de la Eurocopa, que disputarán las selecciones de España e Inglaterra. Conoce los secretos del balompié y de los futbolistas «racializados». No obstante, con anterioridad a su intervención, sería recomendable que visitara a un buen oftalmólogo, o simplemente, a un notable oculista. Confundir a Nico Williams, pamplonés de nacimiento, con Dani Olmo tiene mérito. De todos es sabido que Irene Montero, adaptada al pensamiento irónico de Arthur Baer, Oscar Wilde o P.G. Wodehouse –uno de los tres–, nació tontita y ha tenido varias recaídas.

Sólo entienden sus palabras los que, como ella, nacieron tontitos y recaen constantemente con medida frecuencia. Nico Williams es un joven y gran futbolista del Atlethic de Bilbao, de raza negra, con padres oriundos de Ghana, y por su condición de navarro y su excepcional calidad balompédica, delantero de la Selección de España. Y Dani Olmo, nacido en Tarrasa, España, de raza blanca, rubio, y también formidable futbolista que presta sus servicios en el Leipzig alemán, es además de mucho mejor que el melancólico Morata, el autor del segundo gol español que eliminó a Francia. El primero, maravilloso, lo marcó Yamal, de origen marroquí nacido en España, y por ende, tan español como usted, como yo, como Pradales y como Puigdemont. Pero ella, en una nueva fase de recaída, mezclando churras con merinas y espárragos con zanahorias, ha dicho lo que sigue: «Los dos goles de España fueron marcados por personas 'racializadas'». Y no dijo más porque, como eurodiputada, si seguía hablando se perdía la clase de francés, porque el inglés no le termina de entrar. Siempre tuvo problemas con las lenguas. No sabe callarse en ninguna.

Como comentarista, no tendría precio. Mientras unos hablarían de los futbolistas, ella lo haría de «personas racializadas», y en la Selección de la Pérfida Albión, hay muchas de ellas. Todos los ingleses de raza blanca están en Wimbledon. Los comentarios de las muchedumbres de comentaristas de TVE se enriquecerían con la eximia inventora de 19 sexos y gentil abridora de las puertas carcelarias a los violadores, en soledad o en manada. «El racializado Bellingham ha estado a punto de marcar un gol».

Y era Kane.

Bueno, pues por ahora tranquilidad. Ni cárcel ni Irene comentando el fútbol.

A partir del 20 de julio, ¡Todos al suelo en nombre de Marlasca!

Una delicia.

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