Una metedura de pata de Vox

Vamos a ver, en política, y máxime si no eres de izquierdas, los errores se pagan. En este caso me estoy refiriendo al gran error de bulto, de formas y de contenido cometido por la diputada de Vox al insultar, sin necesidad, a Irene Montero, diciéndole eso de que «solo ha estudiado en profundidad a Pablo Iglesias», siendo además mujer, lo que más me llama la atención, porque contiene un tufo de machismo ancestral sin sentido. Independientemente de que su cargo se lo deba a su pareja, expareja o lo que sea, padre de sus tres hijos, eso sí, ponerse a la altura de las barbaridades de la extrema izquierda a la hora de humillar o atacar al adversario, es un craso error. En este sentido, la señora Toscano debe estar muy satisfecha por el enorme regalo estratégico que le ha dado a la señora Montero, a Podemos y al Gobierno social comunista en general porque ya nadie quiere hablar del bodrio jurídico de esa ley del «solo sí es sí», propio de una película de los hermanos Marx, sino del insulto, con connotaciones al parecer de índole sexual, del estudio en profundidad que puedan tener la famosa pareja podemita entre ellos, algo que a nadie le incumbe en realidad. Desde luego, y siendo de derechas y liberal de toda la vida, lo que menos soporto es esta tendencia a meter la parta de forma crónica que tienen los ilustres representantes de la derecha dura y centroderecha acomplejada. Qué plan tenemos.