Cartas al director
Ocho mil calles para Dámaso
El nombre de Dámaso Guillén está escrito con letras de oro en la gloriosa historia de la Guardia Civil. El agente que ofreció su vida para salvar muchas vidas inocentes. Y su actuación es un ejemplo que debe ser recordado por todos. Porque es de bien nacidos ser agradecidos.
Por eso, será bueno que se le dedique una calle en su Bailén natal y en Beifar, el lugar donde realizó su último acto de servicio. Pero voy más allá. Para recordar siempre su ejemplo, sugiero que, en cada uno de los ocho mil municipios españoles, se rotule una calle, grande o pequeña, larga o corta, con el nombre de «Dámaso Guillén, Guardia Civil», para que su nombre quede como recuerdo de su acto heroico.
Gracias, Dámaso Guillén; gracias, Guardia Civil.