Aumento de la okupación

El problema de las okupaciones con este Gobierno, muy lejos de mejorar, empeora día a día. Los vecinos de determinados barrios están viviendo un auténtico calvario. Nada frena a estos delincuentes, motivo por el cual su bravuconería va en aumento. Recientemente, en La Coruña la policía ha detenido a tres de estos amigos de lo ajeno por cometer presuntamente una agresión sexual a primeros de agosto. Los vecinos del inmueble okupado por estos hombres se concentraron en las inmediaciones exigiendo una solución inmediata que ponga fin al pánico con el que llevan conviviendo desde hace diez años, pero con la legislación actual no veo la solución a este problema. Todo lo contrario. Cada vez irá a peor, salvo que se legisle al respecto y deje de tratarse a estos individuos como sujetos vulnerables cuyos derechos están por encima de los del resto de ciudadanos. La jurisprudencia del Tribunal Supremo es clara respecto al derecho de propiedad. No lo concibe sin que incluya facultades de posesión, tenencia y disfrute de la misma. Pero eso es una cosa y otra muy distinta es cómo esta gente se aprovecha de la lentitud de la Justicia y de los plazos que nuestro ordenamiento jurídico recoge para los juicios de desahucio. Esto último es el auténtico problema. No son precaristas, son delincuentes. Se lo pueden preguntar a nuestros amigos Ana y Ricardo que tienen un piso de su propiedad okupado desde hace más de 6 años, ellos siguen pagando el suministro de electricidad, agua, y demás. Hasta la Agencia Tributaria les ha multado por no declarar los beneficios de este piso, okupado.