Cartas al director
Romperé una lanza por los médicos
No voy a entrar en si es mucho o poco lo que gana un médico en España, es algo que me supera, pero tengo amigos entre ellos.
Diré que sacaron una nota de Selectividad altísima. Luego se pasaron seis años estudiando la carrera, dos preparando el Mir y cuatro en prácticas (cobrando menos). Hasta que fueron titulares de una plaza —lo que ocurrió tras largo tiempo en ejercicio— rotaron de un hospital a otro, algunos distanciados de su hogar.
Tienen un horario de trabajo de ocho horas diarias, de las que no pueden escaquearse. Su profesión es vocacional, de servicio a los demás, no se trata solo de dinero.
Desconozco cuál es la cualificación necesaria para ser ministro en nuestro país. Tampoco tengo idea de su horario de trabajo, lo dejo a la imaginación del lector.
No obstante, da la impresión, de que a la actual ministra de Sanidad el ejercicio de la medicina le pareció exigente y poco rentable económicamente, por lo que prefirió dedicarse a la política. Aunque se haya disculpado, a sus últimas declaraciones me remito.