Cáritas Vizcaya reparte 1.200 raciones de roscón en Bilbao contra la pobreza infantil
La XVIII edición del roscón solidario de Bilbao pretende sensibilizar sobre las situaciones de exclusión y pobreza en tiempo de pandemia, especialmente entre los más pequeños
Bajo las estrictas medidas sanitarias que obligan estos tiempos, la última edición del roscón solidario de Bilbao ha tenido lugar esta mañana en la Plaza Nueva de la capital vizcaína. Con la experiencia del pasado año, las raciones de roscón y chocolate se ha distribuido a través de pack reciclables con el fin de evitar la aglomeración de personas.
¿Cómo se ha hecho este roscón de 300 kilos? Pues utilizando 140 kg. de harina, 25 de azúcar, 37 de mantequilla, 55 docenas de huevos, 13 litros de agua de azahar, 13 kilogramos de levadura, 20 de frutas variadas confitadas para su decoración y tres de sal.
Cáritas lleva desarrollando esta iniciativa desde 2005 con el fin de implicar a la sociedad en la lucha contra la exclusión y pobreza en la infancia y juventud, además de poder recaudar fondos para apoyar los más de 245 proyectos (27 de ellos destinados a apoyar a los menores) que desde la institución católica en Vizcaya se llevan a cabo. El objetivo, tal y como dicen los organizadores, es mejorar «las condiciones de vida de estos menores», especialmente afectados por la pandemia tan a nivel escolar -con la cada vez más honda brecha digital- como a nivel familiar, donde muchos de sus miembros siguen en paro y tienen enormes dificultades para llegar a fin de mes.