Benigno Blanco: «La ideología de género es un error antropológico inmenso»

«Al hablar de sexualidad y género, hay que partir de los hechos», destacó Benigno Blanco durante su intervención en el V Congreso Nacional de Bioética, organizado por la Universidad CEU San Pablo, el Instituto CEU de Humanidades Ángel Ayala y la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP). El abogado y expresidente del Foro Español de la Familia lamentó que, por rechazar el sexo como un dato natural, «la ideología de género es un inmenso error antropológico».

Para Blanco, este punto de partida filosófico tiene consecuencias muy reales en la política y la sociedad. El ponente señaló que las políticas de identidad tienden a generar tribalismo, y criticó la tendencia a legislar de forma ideológica, sobre todo en los menores que manifiestan dudas acerca de su género. «Me parece una barbaridad que el legislador considere los tratamientos médicos y quirúrgicos como la solución generalizada, y que se margine del proceso de toma de decisiones a los médicos y a los padres cuando no están de acuerdo», insistió.

Blanco sacó a colación el dato de que más del 90% de los menores con disforia de género ven resuelto su problema al llegar a la vida adulta, y puso el foco en el desprecio a las opiniones que se salen de la norma. «Se da por supuesto que quien discrepa es mala persona, de ahí que se tache de fobia cualquier punto de vista divergente», señaló.

La biología no engaña

La intervención de Blanco tuvo lugar el lunes por la tarde, durante un panel titulado Identidad sexual y de género. La sesión estuvo moderada por la secretaria académica del Instituto CEU de Estudios de la Familia, Carmen Sánchez Maíllo, y contó también con la participación de la doctora en Medicina Ondina Vélez. En su intervención, esta última abordó las evidencias científicas de las diferencias biológicas entre hombres y mujeres.

Vélez explicó en detalle cómo la diferencia entre sexos comienza a nivel cromosómico. De ahí recorrió las gónadas, las hormonas, los genitales y otros aspectos como las diferencias en el desarrollo cerebral, muscular o incluso de percepción sensorial. «Nuestra biología no engaña», destacó, y lamentó que el énfasis en las cuestiones de género distorsiona la formación de los médicos, alejándola de la evidencia científica.

La también profesora de la Universidad CEU San Pablo citó la última actualización de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE) elaborada por la OMS, en la que deja de considerarse la transexualidad como un trastorno. También enumeró diversas cuestiones bioéticas que surgen al abordar este tema, como las consecuencias irreversibles de las cirugías de cambio de sexo en menores, la situación de las personas transexuales en las cárceles o la dificultad de los procesos de de transición.

Las intervenciones de Blanco y Vélez se enmarcan en un evento que se celebra de forma telemática hasta el miércoles, 9 de febrero. Titulado Bioética al servicio de la vida y de la salud, el congreso abordará temas como los cuidados paliativos, el embrión como paciente o los aspectos éticos de la industria farmacéutica. «La bioética ya no es un asunto de especialistas, sino que nos concierne a todos», destacó la rectora de la Universidad CEU San Pablo, Rosa Visiedo.