Georg Gänswein, secretario de Ratzinger: «Quieren destruirlo y muchos se dejan engañar»

El arzobispo Georg Gänswein, secretario personal de Benedicto XVI, ha dado su parecer sobre la carta en la que el Papa emérito se pronuncia por las acusaciones de abusos sexuales del clero.

En relación a los ataques que ha recibido en estas semanas el Santo Padre, Gänswein alude en una entrevista con Corriere della sera a la existencia de «una corriente que quiere destruir la imagen y la obra de Ratzinger». A su juicio, esta situación obedece a presiones internas dentro de la Iglesia que «nunca ha amado la figura de Benedicto XVI, ni su teología ni su Pontificado. Ahora, es el momento perfecto de hacer cuentas y buscar una damnatio memoriae». Al secretario del Papa emérito le parece «triste este ataque tan vil» y se lamenta porque «muchos se dejen engañar».

Precisamente, hace unos días, salió en Italia Testimoniare la Verità. Come la Chiesa rinnova il mondo (Ediciones Ares), una antología con veintiún textos en los que Gänswein profundiza en los pensamientos y la personalidad de Ratzinger. En su obra, el arzobispo alude a que «la verdad es el gran tema en la vida de Benedicto XVI». Precisamente, Gänswein quien vive con Benedicto en el monasterio Mater Ecclesiae, considera «absurda» la acusación de haber mentido sobre una reunión en Múnich hace más de 30 años.

En su obra, el arzobispo alude a que «la verdad es el gran tema en la vida de Benedicto XVI». Precisamente, Gänswein quien vive con Benedicto en el monasterio Mater Ecclesiae, a donde le siguió tras su histórica renuncia al Pontificado en 2013.

El secretario del Papa emérito recuerda que Ratzinger «ha sido el primero a actuar como cardenal y después ha continuado con la misma línea de transparencia como Papa. Ya durante el pontificado de Juan Pablo II ha cambiado la mentalidad de la época y ha impuesto la línea que el Papa Francisco está siguiendo. Esta es la verdad y es distinta de la que circula en muchos medios de comunicación».

Lo cierto es que el desmentido publicado por el equipo del Papa emérito ante las acusaciones de haber obrado erróneamente ante cuatro casos de abusos en Múnich ha tenido mucho menos eco que la acusación. La dinámica de grandes medios informativos tiende a minimizar los datos que favorecen a Benedicto XVI, quien no ha dudado en pedir perdón, una vez más, a todas las víctimas de abusos.

Lombardi: «La verdad en primer plano»

Por su parte, el presidente de la Fundación Ratzinger, el padre Lombardi, ha asegurado hoy que «siempre ha puesto la verdad en un primer plano». Por ello afirma que «nunca ha intentado esconder lo que pudera ser doloroso de reconocer por parte de la Iglesia. De esta forma, creo que no se puede dudar, en ningún modo, de su sinceridad».

Lombardi, que fue responsable de la Sala Stampa durante el pontificado de Benedicto, considera que la carta que ha escrito el Papa emérito en respuesta al escrito de Múnich «muestra un sentido penitencial profundísimo y sincero, de implicación y cercanía al sufrimiento de las víctimas y de todo lo que ha significado».

También destaca Lombardi, en una entrevista hoy a Radio Vaticana, el hecho de que Benedicto XVI haya querido recalcar «la gravedad de la culpa _gravísima culpa_ y el peso de sus consecuencias sobre todos nosotros». Pese a ello, también dice que no se puede perder nunca la esperanza, ya que «debemos continuar a contemplar la gracia del Señor y tener confianza en Él».