Los obispos lanzan una nueva web para buscar vocaciones

Las cifras de seminaristas no son buenas. Año tras año menguan más y más, algo que, como es lógico, preocupa a los obispos. Por eso, la Conferencia Episcopal Española (CEE) –ahora desde el nuevo servicio de Pastoral Vocacional–, la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), las Obras Misionales Pontificias (OMP) y la Conferencia Española de Institutos Seculares (CEDIS), se aliaron en 2015 para coordinar las estrategias que les permitieran alcanzar a más jóvenes que mostraran una inquietud vocacional.

Este martes han presentado una nueva web conjunta, con motivo de la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y la Jornada de Vocaciones Nativas que la Iglesia celebra el próximo domingo. La primera de ellas invita a los jóvenes a interrogarse sobre su vocación y, a los cristianos, a acompañar y rezar por ellas. La Jornada de Vocaciones Nativas «busca sostener las vocaciones de especial consagración que surgen en los territorios de misión, para que ninguna de ellas se quede frustrada por falta de recursos», han explicado en una rueda de prensa en la CEE.

En la nueva web se pueden encontrar dieciséis vídeos de testimonios a las diferentes vocaciones (sacerdocio, vida religiosa, laicado) y material para la catequesis y la liturgia. En la presentación intervino el misionero ecuatoguineano Nicéforo Obama, quien «aprendió a leer con las misioneras, y hoy es sacerdote». A finales de la década de los 80 llegaron a Ebibyín las misioneras españolas Carmelitas de la Caridad de Vedruna. «Cuando nací y tuve uso de razón, lo primero que vi fue a la Iglesia», explica el padre Nicéforo en una nota de prensa de la OMP. «Me impresionó mucho su labor, y me preguntaba por qué estaban allí». Con ellas aprendió a leer y escribir, fue atendido en su centro de salud… Cuando estaba en Primaria descubrió que Dios le llamaba para seguir a Cristo como ellas y ser sacerdote. «Vi que la vida es vulnerable, y que Jesús es el único que da sentido a la vida y tiene las respuestas a los grandes interrogantes». El ahora sacerdote siguió sus estudios en el seminario menor de su diócesis, y después en el seminario mayor, y fue ordenado hace diez años.

Sin vocaciones por falta de dinero

Los jóvenes como Nicéforo Obama no lo tienen fácil para seguir adelante con su vocación. «Si las familias no tienen para comer, cómo van a pagar los gastos de una vocación», aseguran desde la OMP. Además, ser sacerdote no genera riqueza para la familia, por lo que la inversión no tiene retorno. «Muchas vocaciones no pueden continuar porque las familias no logran ayudarles», explica. Y por ello, la Iglesia se tiene que hacer cargo de la formación que reciben en los seminarios diocesanos. «Mi vocación ha estado siempre impulsada por la Obra de San Pedro Apóstol», afirma. Esta Obra Pontificia tiene el encargo del Papa de sostener 725 seminarios diocesanos que hay en los territorios de misión, y lo hace cada año, gracias a lo que recauda en todo el mundo.