Monseñor Luis Argüello considera «valiosa» la presencia de la basílica en el Valle de los Caídos

El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, ha afirmado que, si sigue existiendo una basílica debajo de la cruz del Valle de los Caídos, la Iglesia debe ser la que decida quién la atienda. Esta declaración se produce en el contexto de las negociaciones del Gobierno español sobre la salida de la congregación de monjes benedictinos, que actualmente habitan el Valle, para finales de 2025.

«A nosotros nos parece algo valioso que debajo de la cruz haya una basílica donde se celebre el sacramento de la comunión, de la reconciliación. Si esto se acepta, pensamos que es la Iglesia quien debe decidir quién atiende la basílica y, desde ahí, establecer un diálogo», explicó Argüello en una entrevista con Europa Press.

Los obispos defienden la importancia de mantener este «lugar de oración», aunque creen que el resto del complejo puede organizarse «como la sociedad quiera». Sin embargo, insisten en que si hay una basílica donde se ore por la paz y la reconciliación, debe ser la Iglesia quien decida sobre su gestión.

Para Argüello, lo fundamental es reflexionar sobre qué favorece mejor un ejercicio de reconciliación en el Valle de los Caídos, especialmente en relación con el cuidado de los restos de las víctimas de la Guerra Civil, destacando la preocupación de la Iglesia por garantizar que las familias puedan saber dónde están sus familiares: «Es lo que a nosotros siempre nos ha preocupado, desde el derecho de que todas las personas, las familias, puedan saber dónde están sus seres queridos», afirmó Argüello.