Comienza el juicio del cardenal Zen en China por los fondos de ayuda a los activistas contra el régimen
Según la fiscalía, el fondo llegó a recibir hasta 270 millones de dólares hongkoneses (alrededor de 34,3 millones dólares)
El cardenal chino Joseph Zen, de 90 años, ha comparecido en los tribunales hongkoneses este lunes junto con cinco activistas prodemocráticos por su presunta vinculación con un fondo que buscaba ayudar a los manifestantes arrestados o heridos durante el movimiento antigubernamental de 2019.
Zen, uno de los clérigos católicos con más autoridad en Asia, y el resto de acusados fueron arrestados el pasado mayo en virtud de la controvertida ley de seguridad nacional por su presunta «colusión con fuerzas extranjeras» a través del 'Fondo de Ayuda Humanitaria 612', del cual Zen era fideicomisario.
El arresto del nonagenario, uno de los dos únicos cardenales vivos en China y miembro del comité asesor del Vaticano para China, conmocionó al mundo católico y provocó suspicacias sobre los intentos de la Santa Sede de reconstruir sus lazos con Pekín.
La Policía no acusó finalmente a Zen ni a los otros arrestados, incluida la abogada Margaret Ng y la cantante pop Denise Ho, en virtud de la ley de seguridad nacional impuesta por Pekín, que puede conllevar una pena máxima de cadena perpetua.
El cardenal Zen ha calificado el acuerdo de 2018 entre el vaticano y China como una «venta» de los católicos clandestinos
Sí están acusados de otro delito menos grave: no registrar correctamente el fondo, creado en junio de 2019 y que cesó sus operaciones a fines de octubre de 2021.
Todos los acusados se han declarado inocentes en esta primera vista -continuará mañana martes-, y quedan aún a la espera de una sentencia que podría conllevar una pena máxima de una multa de 10.000 dólares hongkoneses (alrededor de 1.270 dólares).
Este lunes, Zen entró en la corte de West Kowloon de la ciudad con la ayuda de un bastón ante la atenta mirada de representantes de los consulados de Canadá, Reino Unido y Alemania destacados en Hong Kong, quienes también asistieron a la audiencia.
Crítico con el Vaticano
El abogado defensor de Zen, Robert Pang, pidió a la corte que permitiera que Zen pudiera salir de la sala para descansar si fuera necesario debido a su estado de salud, solicitud que aprobó la magistrada Ada Yim.
Según la fiscalía, el fondo llegó a recibir hasta 270 millones de dólares hongkoneses (alrededor de 34,3 millones dólares) llegados de 103.000 transacciones del público y que parte del dinero se utilizó para actividades políticas.
Zen, catalogado como un «obispo rebelde» cuando encabezó la Iglesia Católica de Hong Kong entre 2002 y 2009, hizo después campaña activa por una mayor democracia en Hong Kong y libertades religiosas en China continental.
El cardenal también criticó sutilmente el histórico acuerdo de la Iglesia Católica Romana firmado en 2018 con China, mediante el cual el papa reconocería a los obispos nombrados por el gobierno chino, y a su vez éste reconocería al papa como único líder de la Iglesia católica.
Zen ha calificado el acuerdo de 2018 como una «venta» de los católicos clandestinos en China, y en 2020 viajó a Roma para instar al papa Francisco a que no renovara el acuerdo, pero se le negó una audiencia.
Tras regresar a Roma desde Kazajistán hace dos semanas, el papa Francisco indicó sobre este caso que «China es un país complejo».
Mientras tanto, el cardenal alemán Gerhard Müller aseguró este mes a la prensa italiana que ningún alto funcionario del Vaticano había expresado su solidaridad o una iniciativa de oración por Zen durante el pasado consistorio, celebrado en el Vaticano por la reforma de la Curia.