Los cinco consejos para ser un padre como san José
San José es el modelo de paternidad y de acompañamiento silencioso en la familia
San José es el modelo de paternidad cristiano; el insustituible acompañante de la Virgen y del niño Jesús. Modelo de discernimiento silencioso y humilde en que se desvela el verdadero sentido de la paternidad y de la familia como lugar en el que aprender la santidad de vida.
Sentido providente de la vida
El sentido de la Providencia en san José se manifiesta en su obediencia a la promesa de Dios. En el evangelio de Mateo encontramos ese sentido de abandono en Dios que domina a José, cuando el ángel le habla en sueños. En Mateo 1:20-21, se le dice a José que no tenga miedo de tomar a María como esposa, ya que ella ha concebido por obra del Espíritu Santo.
Presente en la vida de los hijos
A pesar de estar poco tiempo en la vida de Jesús, san José, con su presencia insustituible, educó a su hijo en el trabajo ordenado, como un padre amoroso y protector. En Mateo 2, 13, José es advertido de nuevo por un ángel para que abandone Belén y huya con su familia a Egipto.
Buen discernimiento
Un buen discernimiento está asociado a la prudencia, al silencio y la escucha de la voluntad de Dios, que se va afinando a medida que estrechamos nuestra relación con Él y obedecemos sus designios.
San José atravesó la prueba de la duda frente a su propia esposa; de ahí que san José también sea prueba viva de lo que un hombre puede hacer cuando se entrega a Dios.
En Mateo 2,19-20, mientras está en Egipto, se le dice de nuevo a José que ya pueden volver su tierra.
Humildad
San José tuvo que salir de sí mismo; cambiar de opinión frente a la enormidad del designio de Dios en el seno de su prometida. San José no muestra arrogancia ni soberbia cuando conoce lo que le ha sucedido a María. El amor es la guía de este hombre que solo mira por el bien de la Virgen.
Familia, el lugar de la santidad
San José nos enseña que la familia es el ámbito para crecer en santidad. La santidad de José se acrecentó en el cuidado de la familia, que de este modo está llamada a ser el lugar del cuidado de la persona y de su apertura al mundo y al prójimo.