Secuestran a seis religiosas en Haití y el obispo se ofrece como moneda de cambio

Seis religiosas de la congregación de Santa Ana han sido secuestradas por un grupo de hombres armados que tomó el control de un autobús de camino a Puerto Príncipe el pasado viernes 19 de enero. A bordo, viajaban otros pasajeros y el conductor, que han sido llevados a un destino desconocido, según informan los medios vaticanos.

Los hechos fueron confirmados pro la Conferencia de Religiosos de Haití a través de un comunicado y denunciados enérgicamente por Pierre-André Dumas, obispo de Anse-à-Veau y Miragoâne (Haití), que ha condenado el secuestro como un acto «odioso y bárbaro», que «ni siquiera respeta la dignidad de estas mujeres consagradas que se entregan de todo corazón a Dios para educar y formar a los jóvenes, los más pobres y vulnerables de la sociedad», ha exclamado.

En su comunicado, el obispo ha pedido su liberación y el fin de estas prácticas «despreciables y criminales». Dumas se ha ofrecido incluso como rehén en su lugar, al tiempo que ha invitado a toda la sociedad del país a formar una cadena de solidaridad «en torno a todas las personas secuestradas, para obtener su liberación y garantizarles un regreso rápido y seguro con sus familias y seres queridos».

Durante el Ángelus de este domingo, el Papa Francisco ha pedido oraciones por las religiosas y el resto de viajeros. «Pido con dolor por la concordia social en el país», ha exclamado.