El Papa aclara ante los obispos de Ucrania el malentendido en sus palabras sobre la «gran Rusia»
El diálogo que el Santo Padre tuvo con los periodistas a su regreso de Mongolia causó algunos malentendidos debidos a ciertas declaraciones del Papa, como las realizadas durante la videoconferencia con jóvenes rusos el 25 de agosto
Francisco ha querido aclarar una declaración que ha causado confusión. Se ha dirigido en especial a los obispos greco-católicos ucranianos, reunidos en Roma a causa de la preparación del sínodo. Este malentendido tuvo lugar durante su declaración acerca de 'la Gran Rusia', y ha reiterado un mensaje claro: «la guerra es una cosa del diablo».
El malentendido
El Papa ha explicado lo que comentó ante los periodistas en el vuelo de regreso de Mongolia, que sus declaraciones sobre la Gran Rusia se referían al sentido cultural y no, como algunos interpretaron, como una forma de alentar a los jóvenes católicos rusos a tomar ejemplo de algunos personajes históricos rusos, conocidos por sus ideas imperialistas.
Por su parte, según precisa 'Vatican News', los obispos ucranianos han expresado al Papa que ciertas declaraciones y gestos de «la Santa Sede y de Su Santidad» son dolorosos y difíciles de entender para el pueblo ucraniano «que sangra en la lucha por su dignidad e independencia». También han afirmado que se sienten utilizados por la propaganda rusa «para justificar y apoyar» la «ideología asesina»: «los fieles de nuestra Iglesia son sensibles a cada palabra de Su Santidad como voz universal de la verdad y la justicia».
Una sensación de impotencia
Durante casi dos horas, antes de bajar a la Plaza de San Pedro para la audiencia general, Francisco ha escuchado de primera mano el relato de lo que está ocurriendo en Ucrania y ha compartido el drama que le han hecho vivir los testimonios procedentes de diversos lugares de Ucrania. Mediante un comunicado y «con unas breves intervenciones» ha expresado sus sentimientos de cercanía y al mismo tiempo «la sensación de impotencia que se experimenta ante la guerra».
En concreto, el Papa ha recordado que los jóvenes ucranianos que se ha ido encontrando durante las audiencias «han olvidado su sonrisa». El Pontífice lamenta que «uno de los frutos de la guerra sea quitar la sonrisa a los niños». También ha mostrado su deseo de cumplir una petición recibida durante el encuentro: que «en el mes de octubre, particularmente en los santuarios, el rezo del rosario se dedique a la paz y a la paz en Ucrania».
De todas formas, Francisco asegura que no se olvida de Ucrania, es más, les recuerda en sus oraciones «cada día». Todos los días, el Santo Padre, les hace presentes ante «el icono de la Virgen» que le regaló el arzobispo mayor Sviatoslav Shevchuk antes de volver de Buenos Aires.