Cómo limpiar la freidora de aire para eliminar la grasa y ganar en salud

En los dos últimos años el electrodoméstico estrella ha sido la freidora de aire con unas ventas que superaron el millón y medio el año pasado. La posibilidad de cocinar sin aceite supone, además de una forma más saludable, un ahorro económico considerable. Estos aparatos, más parecidos a un horno de convección, son sencillos de manejar ya que cuentan con diferentes programas con temperatura y tiempos. En su interior hay una cubeta en la que se introducen los alimentos.

Ahora bien, en ocasiones resulta difícil eliminar la grasa de los alimentos cocinados. Para deshacerse del olor y sabor a pescado o fritura, las redes sociales están llenas de consejos y trucos rápidos y eficaces. María Fernández, conocida en Instagram como @Maria_Nordichouse, aconseja meter en la cubeta una pastilla de lavavajillas y 3/4 l de agua caliente. A continuación poner un programa 200° durante 20 minutos. De esta forma la grasa se desprenderá por sí sola con tan solo enjuagar con el agua del grifo. Otras de las recomendaciones que pueden encontrarse es sustituir la pastilla por lavavajillas en polvo.

El riesgo de las altas temperaturas

La rápida popularidad de estos electrodomésticos llevó el pasado mes de septiembre a la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) a advertir sobre un potencial riesgo de un uso incorrecto. Aunque en realidad este aparato es más parecido a un pequeño horno, obliga a controlar la temperatura máxima que alcanza la resistencia, sobre todo si se van a cocinar patatas o alimentos ricos en cereales, como unas galletas o un bizcocho.

OCU advierte que cuando las patatas y los alimentos ricos en almidón (habitual en los cereales) se hornean a más de 195 °C se favorece la formación de acrilamida, una sustancia tóxica y cancerígena. Por eso, para este tipo de alimentos es aconsejable controlar que la temperatura de la resistencia de la freidora se mantiene por debajo de este límite.