Qué comer para detener la diarrea de forma natural

Pocas cosas hay más desagradables que esos retortijones acompañados de diarrea que nos llevan directos al servicio y nos alertan de que algo no va bien en nuestro estómago.

Los médicos hablan de diarrea cuando hay más de tres deposiciones al día y estas disminuyen su consistencia. La mayor parte tienen su origen en un proceso infeccioso producido por un virus o intoxicación alimentaria por lo que suele ir asociada a otros síntomas, como fiebre, intolerancia a la comida, náuseas, vómitos y dolor abdominal.

En la mayoría de los casos la diarrea suele ser leve con lo que según los expertos de la Universidad de Navarra, «basta con administrar abundantes líquidos en el propio domicilio del paciente. También puede ser útil una dieta astringente. Si la diarrea es severa y se acompaña de deshidratación, es necesario tratar al paciente en el hospital para administrar líquidos por vía venosa».

Qué puedo comer con diarrea

La diarrea leve no suele requerir tratamiento y se aconseja una dieta blanda y tomar muchos líquidos.

La dieta indicada es la astringente o antidiarreica que se basa en la introducción de alimentos de forma paulatina según tolerancia individual, según explican los expertos de salud de Mapfre. Su finalidad es conseguir que el tracto digestivo se recupere poco a poco y se vaya acostumbrando a una motilidad o movimiento intestinal.

Estas son 12 recomendaciones básicas:

• Fraccionar las comidas diarias en cinco a seis tomas para disminuir en lo posible el estímulo sobre el movimiento intestinal.

• Consumir alimentos blandos o triturados, más fáciles de digerir.

• La temperatura del plato debe ser ambiente o templada.

• La forma de cocinar los alimentos debe ser hervido, al vapor o escalfado, rehogado con poco aceite, plancha u horno.
• Consumir las carnes y aves sin piel ni grasa visible. Se recomienda el pollo hervido sin piel, fiambre de pollo o pavo.
• Elegir preferiblemente el pescado blanco (lenguado, dorada o lubina), cocinado sin grasa.
• Tortillas elaboradas con poco aceite o huevos pasados por agua.

• Reponer los líquidos con infusiones suaves (manzanilla, hierba luisa, melisa) y beber agua en pequeñas cantidades de forma frecuente.

• La fruta que sí se puede comer es el plátano maduro o el albaricoque. Además, se puede consumir la pera cocida o al horno, el membrillo y la manzana en compota o al horno.
• La verdura que sí se puede añadir a la dieta es la zanahoria cocida.
• Féculas: se puede comer arroz, patata hervida y pan tostado.
• Los zumos se pueden tomar colados y sin azúcar.

Qué no se debe comer

• Evitar alimentos ricos en fibra: verduras, frutas, legumbres, frutos secos, frutas secas y productos integrales (muesli, pan integral, arroz integral,…).

• Evitar la leche y probar tolerancia al yogur (se digiere mejor al estar parcialmente digerido por la bacterias o fermentos lácteos).

• Limitar los aceites, mantequilla, margarinas, nata, crema de leche, salsas tipo mayonesa, bechamel, sofritos, bollería y repostería.
• Limitar el aguacate, las aceitunas y los frutos secos.

• Restringir los condimentos como: vinagre, café, chocolate, pimienta, pimentón y guindilla.

• Evitar el consumo de alcohol.

• Moderar el uso de sal y azúcar.
• Evitar técnicas grasas como: rebozado, empanado, guiso y frito, ya que la grasa irrita la mucosa digestiva.