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Alimentación
Los alimentos que nunca debes congelar, según Sanidad
Hay alimentos que nunca deberíamos congelar ya que podrían, incluso, ser perjudiciales para la salud
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha lanzado una advertencia sobre los riesgos de congelar ciertos alimentos que podrían perder calidad o representar un peligro si no se manejan correctamente.
La importancia de una congelación segura
El frigorífico y el congelador son elementos imprescindibles en los hogares españoles, ya que permiten alargar la vida útil de los alimentos y reducir el desperdicio. Sin embargo, un uso inadecuado puede acarrear problemas. Según la AESAN, la congelación es un método seguro de conservación que inactiva microorganismos que pueden provocar enfermedades. No obstante, estos microorganismos no se eliminan, sino que se detienen mientras los alimentos se mantienen a temperaturas de -18 °C o inferiores.
Cuando los alimentos se descongelan, los microorganismos pueden reactivarse y multiplicarse rápidamente, incrementando el riesgo de intoxicación alimentaria si no se manejan con cuidado. Por ello, es esencial seguir las pautas recomendadas para congelar, almacenar y descongelar alimentos.
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Alimentos que no deben congelarse
La AESAN señala que hay ciertos productos que, aunque no son peligrosos al congelarse, pierden textura, sabor o cualidades. Entre ellos destacan:
- Verduras y frutas, como lechugas.
- Patatas.
- Huevos con cáscara.
- Productos ricos en grasa, como la mayonesa.
- Alimentos fríos.
Para garantizar una buena conversación, recomiendan congelar los productos lo más rápido posible y asegurarse de hacerlo antes de que superen la fecha de caducidad. También subrayan la importancia de no introducir alimentos calientes en el congelador, ya que esto puede afectar a los demás productos, y nunca recongelar alimentos que ya han sido descongelados.
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Una guía práctica para evitar riesgos
Además de los alimentos a evitar, la AESAN insiste en seguir unas pautas básicas: congelar los alimentos lo antes posible tras su compra o preparación, mantenerlos siempre a las temperaturas adecuadas y planificar correctamente su uso para evitar desperdicios.
Con estos consejos, la Agencia busca fomentar un uso más seguro y eficiente del congelador, asegurando la calidad y seguridad de los alimentos que consumimos diariamente.