Recreación del herpes zósterGSK

Herpes zóster o cuando el virus de la varicela se reactiva

Una de cada tres personas de entre 50 y 90 años va a presentar un episodio de esta infección viral a lo largo de su vida

Una de cada tres personas de entre 50 y 90 años va a presentar un episodio de herpes zóster a lo largo de su vida. Esto se debe a que la 'culebrilla' está causada por la reactivación del virus de la varicela-zóster, el mismo virus que causa la varicela y que se contrae, generalmente, en la infancia. A medida que las personas cumplen años, su sistema inmunitario se debilita, lo que se conoce como inmunosenescencia, y pierde la capacidad de mantener el virus controlado; lo que aumenta la posibilidad de padecer herpes zóster. Esto también ocurre en personas con inmunodepresión debido a determinadas enfermedades o tratamientos.

Una encuesta de GSK, realizada a 3.500 adultos mayores de 50 años en 12 países, ha evaluado el conocimiento de los participantes acerca del herpes zóster, sus desencadenantes y su impacto en la vida de las personas.

Los hallazgos muestran que una proporción de los encuestados no es consciente de su riesgo de desarrollar la culebrilla, con un 86 % que subestima este riesgo. Una cuarta parte (26 %) estima que 1 de cada 100 personas corren riesgo de contraer herpes zóster a lo largo de su vida3, casi una quinta parte (17 %) piensa que es 1 de cada 1.0004, y casi la mitad (49 %) cree que es poco probable que desarrolle la culebrilla.

Ampollas dolorosas

Los resultados de la encuesta también muestran una falta de concienciación sobre el dolor que puede causar la culebrilla. La enfermedad generalmente se presenta con ampollas, que pueden ser dolorosas, afectando de manera más frecuente al tórax, cara y cabeza; a menudo se describe como una sensación de ardor, punzante o similar a una descarga eléctrica. Sin embargo, 1 de cada 10 adultos encuestados no conoce los síntomas más comunes del herpes zóster y más de una cuarta parte (28 %) cree que esta enfermedad es «inofensiva».

Neuralgia postherpética

En los casos en los que el dolor persiste tras la curación de la erupción del herpes zóster, puede aparecer la neuralgia postherpética (NPH), un dolor crónico de origen nervioso que puede persistir semanas, meses e, incluso, varios años. La NPH es la complicación más común del herpes zóster afectando hasta 1 de cada 10 personas.

La doctora Raquel Alfaro, especialista de Medicina Familiar y Comunitaria en el Servicio Andaluz de Salud y secretaria del Grupo de Trabajo de Enfermedades Infecciosas, Migrante, Vacunas y Actividades Preventivas (IMVAP) de SEMERGEN, explica que: «hay muchas dudas en torno al herpes zóster y muchos pacientes tienen la idea equivocada de que el herpes zóster es únicamente una erupción cutánea autolimitada, y es mucho más que eso. El herpes zóster puede causar complicaciones de diversa gravedad, desde complicaciones como la sobreinfección de las lesiones hasta complicaciones a nivel del sistema nervioso como ictus, sordera, afectación de fibras nerviosas… siendo la complicación más frecuente la neuralgia postherpética, la cual aparece en el 10 % de los pacientes que sufren herpes zóster y, dentro de éstos puede llegar a aparecer hasta en un 50 % de los pacientes mayores de 60 años y en un 75 % de los mayores de 70 años» y añade: «El haber sufrido un herpes zóster no supone inmunidad a volver a padecerlo de nuevo».