Shoku Iku, la filosofía japonesa para ser feliz comiendo y no engordar
Se trata de apostar por una alimentación consciente
La dieta mediterránea, la vegetariana o la proteica contribuyen a llevar un estilo de vida saludable y perder peso, pero todas restringen o eliminan alimentos. A diferencia de cualquier otro tipo de dieta, el método Shoku Iku, ideado por el médico militar japonés Sagen Ishizuka, busca adquirir los conocimientos sobre lo que comer, cómo combinar los alimentos y saber reconocer cuándo parar sin llegar a estar saciado.
La chef Makiko Sano es una de las mayores divulgadoras de esta filosofía y en su libro Shoku Iku: cocina japonesa para una vida larga y saludable explica cómo este método «replantea por completo nuestra relación con los alimentos. Se trata de apostar por una alimentación consciente».
Una de las ventajas de la dieta Shoku Iku es que no restringe ningún alimento que se considere saludable priorizando frutas, verduras, nueces, semillas, granos integrales y legumbres. En esencia, la dieta debe incluir proteínas, fibra, grasas saludables y micronutrientes. Lo que no incluye el consumo de alimentos ultraprocesados.
Aplicar el 'Hara Hachi Bu'
El Shoku Iku busca identificar cuando el cuerpo ha comido suficiente sin necesitar de estar completamente saciado. Esta filosofía aplica el Hara Hachi Bu que se puede traducir como 'ocho partes del vientre' y significa comer hasta un 80 % de la capacidad del estómago. Para conseguirlo, los expertos aconsejan comer despacio para que cerebro y estómago registren las sensaciones de plenitud.
Por último, el Shoku Iku, como filosofía de vida fomenta la importancia de compartir las comidas. Diferentes investigaciones han concluido que sentarse a la mesa con otras personas, donde es común conversar y comer de manera más lenta, promueve reconocer la sensación de saciedad en las comidas e, indirectamente, evita la obesidad.