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Educación

El Gobierno aprueba la suspensión de los exámenes de recuperación en la ESO

Los alumnos podrán pasar de curso con dos suspensos

El Gobierno ha aprobado el real decreto ley que permitirá a los alumnos pasar de curso aun habiendo suspendido, eliminando las recuperaciones para tener aprobadas las asignaturas. Esta medida será aplicable a toda la ESO y entrará en vigor este mismo curso.

Alegría ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros que «el nuevo sistema de evaluación hace hincapié en el diagnóstico temprano de las dificultades de los estudiantes» y así poder aplicar «medidas de refuerzo y recuperación».

«Evitamos considerar la repetición de curso como la mejora de las soluciones para nuestros estudiantes. El 30 % de los estudiantes hasta los 15 años han repetido curso al menos una vez; esta cifra no sería preocupante si luego adquirieran las competencias necesarias. La realidad nos demuestra lo contrario: las tasas de abandono escolar vienen engrosadas por los repetidores».

Por ello, Alegría ve fundamental «reforzar el trabajo colaborativo de los equipos docentes, que serán los que decidan la promoción y titulación de nuestros jóvenes».

El primer borrador de este proyecto eliminaba ya estos exámenes de recuperación, pero la ministra Pilar Alegría aseguró que dejaría en manos de las comunidades la decisión de mantener o no estos exámenes. Sin embargo, en nuevo bandazo de la titular de Educación, el Ministerio decidió suprimirlos desde este mismo curso y en todo el territorio, lo que ha provocado el enfado de los distintos grupos parlamentarios.

Así, la decisión de aprobar al alumno con asignaturas suspendidas será adoptada por el equipo docente tras una convocatoria de evaluación al finalizar el curso. El profesor decidirá, según el texto, cuando la naturaleza de las asignaturas «les permita seguir con éxito el curso siguiente y se estime que tiene expectativas favorables de recuperación y que dicha promoción beneficiará su evolución académica».

Preguntada si esta ley atenta contra la cultura del esfuerzo, Alegría ha asegurado que «no corre ningún riesgo» ya que la LOMLOE promueve el esfuerzo «basado en la motivación y no en el castigo».

La evaluación en Bachillerato

Respecto a la evaluación en Bachillerato, esta será «continua y diferenciada según las distintas materias» y los alumnos pasarán de primero a segundo a pesar de tener dos suspensos como máximo. Para obtener el título, será necesaria la evaluación positiva en todas las materias de los dos cursos, aunque excepcionalmente, el equipo docente podrá decidir si el alumno tiene un suspenso.

Para que se dé esta condición, el equipo docente tendrá que considerar que el alumno ha alcanzado los objetivos y competencias vinculados a ese título; que no se haya producido una «inasistencia continuada y no justificada» por parte del alumno en la materia; que el alumno se haya presentado a las pruebas y realizado las actividades necesarias para su evaluación, incluidas las de recuperación; y que la media de las calificaciones obtenidas en todas las asignaturas de la etapa sea igual o superior a un 5.

Nuevas plazas de Educación Infantil

Alegría también ha anunciado una partida de 670 millones de euros para la apertura de 65.000 nuevas plazas para niños de 0 a 3 años. 

Según la ministra, «la escolarización temprana es clave para un desarrollo exitoso», por lo que estas plazas serán «públicas, gratuitas y en centros de máxima calidad educativa» para poner en marcha «el ascensor social» desde el primer momento.

«Reciclaje» de la población activa

Por último, ha anunciado una partida de 87,7 millones para la formación de trabajadores y desempleados. La formación se centrará en los sectores emergentes teniendo en cuenta aquellos con mayor número de trabajadores en ERTE.